'Sería muy grave que el Ejército se ocupara del orden público'
La sede del Ministerio de Justicia y Seguridad Interior de Argentina está desierta este sábado lluvioso en Buenos Aires, pero el ministro está en su despacho. No le falta trabajo a Juan José Álvarez, responsable de la seguridad de los argentinos y jefe de los 75.000 integrantes de las fuerzas de seguridad (Policía Federal, Gendarmería, Prefectura Naval y servicio penitenciario). Acaba de anunciar la creación de un 'comité de crisis' para combatir la escalada mortífera de la delincuencia en la provincia de Buenos Aires. Esto implica la entrada de unidades federales en un territorio controlado por la fuerza más criticada del país por corrupta y cómplice del delito: la policía de la provincia de Buenos Aires, la Bonaerense.
'Hay que hacer con la policía lo mismo que con los militares cuando se recuperó la democracia'
El reciente hallazgo del cadáver del joven de 17 años Diego Peralta un mes después de su secuestro y de que su familia, de pocos recursos, pagara un rescate ha colmado el vaso. 'En un régimen federal como el argentino, de mí dependen las fuerzas policiales federales, no las provinciales', repite el ministro, abogado de 47 años, nieto de vascos, que ha hecho su carrera en el peronismo precisamente de la provincia de Buenos Aires.
Pregunta. ¿Esperaba recibir la noticia del hallazgo del joven Diego Peralta muerto o tenía esperanzas de que apareciera con vida?
Respuesta. Yo tenía una información limitada, porque el secuestro ocurrió en una jurisdicción que no es la de mis fuerzas. Dicho esto, no tenía ninguna duda de que aparecería un cadáver, porque transcurrió mucho tiempo y la policía avanzaba muy fuerte para esclarecer el caso.
P. Diversos estudios indican que en Buenos Aires y el conurbano se comete un delito cada seis segundos y que en los años noventa la delincuencia se ha triplicado.
R. Es cierto que los homicidios y otros delitos violentos y los robos de autos han aumentado en los últimos 10 años. En forma dispareja. En la capital no hay mucha variación, pero sí en el conurbano, que se ha convertido en la zona más complicada.
P. ¿No cree que la opinión pública ha recibido las medidas que ha anunciado con gran escepticismo porque desconfía de la policía?
R. Es indudable que esto es una desventaja inicial. No hay plan de seguridad que funcione si se desconfía de quién lo va a llevar adelante, que es la policía. Creo que el escepticismo de la gente va a disminuir cuando vea que este operativo conjunto de las fuerzas policiales da resultados y disminuye esta sensación tan grave de los ciudadanos de haber perdido la libertad.
P. ¿Por qué la gente desconfía de la policía?
R. No hay duda de que ha habido hechos en los que ha quedado seriamente cuestionada la actuación de la policía. Este tipo de sucesos se ha repetido en los últimos años de forma peligrosa. Casos como el asesinato de Diego Peralta o del periodista Cabezas y otros episodios resonantes, en los que quedó demostrada o fuertemente sospechada la actuación policial.
P. Ahora la Policía Federal investigará las bandas que actúan en la provincia de Buenos Aires. ¿Teme que la Bonaerense se resista a ser investigada cuando haya sospechas de actividades delictivas?
R. Quien está en una actividad delictiva, sobre todo si es policía, lo menos que se puede hacer es atacarlo rápidamente. Mal podríamos tratar de disminuir la sensación de inseguridad si no atacáramos uno de los motivos por los cuales esos delitos ocurren o se permiten.
P. ¿Cómo se combate la delincuencia policial y por qué la Bonaerense tiene tan mala imagen?
R. Hace falta una decisión política muy fuerte. Aquí no han fracasado las formas de hacerlo, sino que no se ha sido lo suficientemente enérgico desde el poder político.
P. ¿Es necesaria una purga amplia en la policía de la provincia de Buenos Aires?
R. No es sólo un problema de purgas. Lo que hay que hacer es un control férreo de las fuerzas de seguridad por el poder político. Esto se ha hecho con las Fuerzas Armadas cuando se recuperó la democracia en 1983.
P. ¿Qué opina sobre una eventual participación de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad interior como sugiere el ex presidente Carlos Menem?
R. Creo que las Fuerzas Armadas tienen una preparación y una doctrina distinta de la que se debe tener para actuar en cuestiones de seguridad interior. Sería muy grave desde el punto de vista de la historia pasada argentina, porque reavivaría fuertes conflictos.
P. Pero no todo el mundo opina como usted en el Gobierno.
R. Puede ser. No seguiría ni un segundo en el cargo que ocupo si las Fuerzas Armadas intervinieran en misiones de seguridad interior.
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