Una sociedad pública rehúsa facilitar al Ararteko la lista de sustituciones

El Ararteko denunciará ante el Parlamento vasco, en el informe que presente el próximo año, la 'falta de colaboración' de la empresa pública dependiente del Departamento de Sanidad, Osatek S.A, que se dedica a gestionar los aparatos de exploración y tratamiento radiológico en los hospitales de Osakidetza, por haber eludido durante más de un año facilitar las listas utilizadas para cubrir vacantes y ha mostrado un 'notorio y reiterado ánimo de evitar un pronunciamiento cierto' sobre su existencia, según se indica en una comunicación firmada por su titular, Mertxe Agúndez. La mediación del Ararteko fue solicitada en abril de 2001 por Mari Carmen García Corbalán, administrativa de 30 años, que, tras trabajar durante casi tres años en Osatek, fue despedida de forma improcedente y reemplazada por otra secretaria que había suspendido las pruebas de acceso.

García Corbalán no volvió a ser contratada, pese a que por su experiencia era la primera en una bolsa de trabajo que nunca fue hecha pública por esta empresa pública de tecnología sanitaria.

En 1998 esta vecina de Durango con título de formación profesional en técnico administrativo e informática, tras superar distintos exámenes y una entrevista, fue seleccionada por Osatek para un puesto de secretaria en la unidad del ambulatorio bilbaíno de Doctor Areiza. Con distintos contratos eventuales y de obra trabajó en varios centros de la empresa pública hasta que el 19 de febrero de 2001 recibió por sorpresa la carta de despido.

Con el propósito de recuperar su empleo, solicitó la intervención del Ararteko, al tiempo que demandó a Osatek por la vía judicial. El titular del Juzgado de lo social número 1 de Bilbao reconoció la improcedencia del despido, pero no lo declaró nulo. Es decir, estableció que se le indemnizara, pero no impuso a la empresa su readmisión. Tampoco lo hizo el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, al que Mari Carmen recurrió más tarde.

Desde un principio, el Ararteko trató de garantizar que la trabajadora fuera incluido en las listas de sustituciones de Osatek 'como una candidata más' y sin que fuera objeto de represalias. Para ello, la institución que dirige en funciones Mertxe Agúndez intentó sin éxito, durante casi año y medio, que esta sociedad aclarara el método utilizado para cubrir vacantes. La última recomendación del Ararteko antes de decretar 'agotadas todas las posibilidades de mediación' fue cursada el 22 de febrero de 2002, cuando instó a la empresa a introducir a Mari Carmen en los listados de posibles sustitutos. Osatek respondió con el anuncio de la organización de una prueba para crear una bolsa de trabajo formada por secretarias, celadores, y técnicos manipuladores, que se celebró en Bilbao el pasado 18 de junio. Pero no aclaró si Mari Carmen había figurado hasta la fecha en esa bolsa.

Concepción Hernández Macías, gerente de la sociedad pública, estima que se han cumplido 'al pie de la letra' las recomendaciones recibidas del Ararteko, aunque asegura que la compañía no pudo mostrar la lista de sustituciones porque se habían agotado los candidatos seleccionados anteriormente. Por su parte, Mari Carmen García Corbalán ha recurrido por la vía contencioso administrativa las reiteradas negativas de la empresas a informarle si figuraba o no en la lista de sustituciones y qué puntuación tenía. La vista del caso ha sido señalada para mañana.