Familia y amigos despiden al barón Thyssen con un funeral íntimo
Se negocia la apertura de un museo en Girona con obras de la colección
Hans Heinrich von Thyssen-Bornemisza, fallecido el sábado en su casa de Sant Feliu de Guíxols (Girona), fue homenajeado ayer en la población de la Costa Brava -donde se negocia la apertura de un museo con obras de la colección privada de su viuda, Carmen Cervera- por familiares, amigos y una representación institucional en un funeral íntimo. Su viuda y sus dos hijos pequeños, Borja y Alexander, presidieron la ceremonia. Thyssen será enterrado mañana en el panteón familiar del castillo de Schloss Landsberg, en Alemania.
La extraordinaria panorámica sobre el Mediterráneo que se divisa desde el pequeño y pintoresco enclave de la ermita barroca de Sant Elm, en un acantilado de Sant Feliu de Guíxols, es la misma que el barón Thyssen podía contemplar desde su residencia de Mas Mañanas. El féretro fue trasladado allí a las siete de la mañana de ayer donde permaneció durante todo el día para que los vecinos de la población en la que vivió los últimos meses pudieran despedirse de él. Una bandera azulgrana del linaje familiar cubría el ataúd y se instalaron varios libros para recoger las firmas de condolencia.
Vestida de riguroso luto, Carmen Cervera llegó a la ermita a las 11.45 acompañada de los dos hijos menores del barón, y tras permanecer unos minutos a solas en el interior de la capilla, el funeral empezó a las 12.00. La representación institucional fue escasa. El secretario de Estado de Cultura, Luis Alberto de Cuenca; el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Barcelona, Ferran Mascarell, y el alcalde de Sant Feliu de Guíxols, Joan Alfons Albó, con el consistorio en pleno. También acudieron el líder del PSC y ex alcalde de Barcelona Pasqual Maragall, y el conservador del Museo Thyssen de Madrid, Tomás Llorens.
El alcalde de Sant Feliu de Guíxols elogió la discreción con que Carmen Cervera y su esposo han ayudado al municipio. En alusión a la creación de un futuro museo Thyssen en la población, que se negociaba con el coleccionista, dijo que esta colaboración continuará en el futuro. Las negociaciones empezaron hace dos años y ayer el consejero de Cultura de la Generalitat de Cataluña, Jordi Vilajoana, afirmó tras dar el pésame a la viuda que las conversaciones se acelerarán 'para que el museo sea un pequeño homenaje de aprecio y afecto al barón Thyssen por Sant Feliu de Guíxols'.
Pintura del XIX y XX
Carmen Cervera ha hablado desde hace tiempo de la posibilidad de construir un museo en Sant Feliu de Guíxols. El centro, que se ubicaría en el actual hospital geriátrico del municipio (que está previsto desalojar dentro de un año) se quiere que sea un lugar de referencia de la pintura catalana de los siglos XIX y XX. Entre los cuadros que se expondrían, petenecientes a la colección particular de Carmen Cervera, están obras de Isidre Nonell, Ramon Casas, Anglada-Camarassa y Josep Amat, entre otros. También albergaría un espacio para promocionar a pintores del municipio de Sant Feliu de Guíxols.
Unas 60 personas de los círculos más íntimos de la familia y los representantes institucionales siguieron la ceremonia desde el interior de la ermita. En un centenar de sillas colocadas en el exterior encontraron acomodo vecinos de la población y de urbanizaciones próximas, así como numerosos curiosos. Durante la ceremonia, que reunió a unas 200 personas y fue retransmitida al exterior por megafonía, se escucucharon temas musicales, como el popular El cants dels ocells y el Ave María de Schubert, y se leyeron pasajes de los Evangelios en una ceremonia oficiada por el sacerdote Pere Carreres en la que se utilizaron tres lenguas: catalán, castellano y alemán. Con emoción contenida, Carmen Cervera recibió los pésames.
Babelia
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