Sharon permite a Solana visitar a Arafat

La Unión Europea ha logrado una pequeña victoria diplomática en su afán de que el denuedo por contribuir a la paz en Oriente Próximo se traduzca alguna vez en hechos. Ariel Sharon ha permitido que Javier Solana se entreviste con Yasir Arafat en su asediado cuartel general de Ramala. El alto representante aseguró ayer en Valencia tener garantías directas del primer ministro israelí para poder reunirse con el líder palestino. Solana llegará hoy acompañado del enviado especial europeo para la región, Miguel Ángel Moratinos, en una misión encaminada a conseguir el alto el fuego.

'Ha sido laborioso', reconoció una fuente diplomática europea al explicar la negociación con Sharon para hacer posible el encuentro con Arafat. Los dos diplomáticos se entrevistarán también con el primer ministro israelí. Sin duda, es un pequeño éxito con el que compensar la humillante misión del ministro español de Exteriores, Josep Piqué, y Solana hace más de dos semanas a Jerusalén cuando las autoridades israelíes no autorizaron la visita de José María Aznar a Arafat y luego se negaron in situ a que Piqué y Solana fueran a Ramala. 'Son siempre bienvenidos', declaró en Valencia, al término de la Conferencia Euromediterránea, Simon Peres. 'Los representantes de la UE se pueden mover tan libremente como los de EE UU. Se trató de un malentendido', aseguró el jefe de la diplomacia israelí.

Éste, que había llegado la pasada madrugada a la capital levantina y que no se entrevistó ni con el ministro palestino de Cooperación Internacional, Nabil Shaat, ni entró en el plenario de la conferencia, tuvo una difícil reunión a solas con los Quince, en la que volvió a expresar la preocupación del pueblo judío 'por el profundo antisemitismo que respira la sociedad europea'. En la rueda de prensa posterior exhibió un ejemplar del semanario satírico español El Jueves que muestra a Sharon con un gesto nazi.

'Queso 'gruyère'

Piqué respondió que la UE condena sin reservas los atentados terroristas palestinos y los ataques a sinagogas en Europa, pero insistió en que la violencia del integrismo palestino no legitima a Israel al abuso de la fuerza. El comisario europeo de Relaciones Exteriores, Chris Patten, quizá en este momento la voz más franca sobre la crisis entre los dirigentes europeos, le espetó a su colega que su país tiene derecho a vivir en paz, pero no a 'convertir el territorio palestino en un queso gruyère'.

La visión de Sharon de convocar una conferencia regional bajo dirección norteamericana y participación de países árabes moderados comporta, según Peres, la incorporación del llamado cuarteto, es decir, el propio EE UU, la UE, Rusia y la ONU. 'Hay que internacionalizar el conflicto', pero no hasta el extremo del despliegue de una fuerza de interposición, ha comentado el cada vez más debilitado dirigente laborista en Valencia, quien, sin embargo, no tiene intención de dimitir porque considera todavía útil su función.

El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, ya ha propuesto sede sobre una eventual conferencia: su país. ¿Y Arafat? Según Peres, el anciano líder ya no controla a su pueblo, la Autoridad Palestina está siendo contaminada por Siria e Irán, y se necesita un líder más firme. Peres comentó que sus juicios sobre la capacidad del presidente palestino se basan en la realidad y no en un comentario despectivo hacia su persona.

El contencioso de Ramala no tiene visos de fácil arreglo. Solana va a Ramala con alguna idea que no quiere desvelar. Los Quince le pidieron ayer a Shaat un esfuerzo de flexibilidad para solucionar el futuro de los presuntos implicados en el asesinato del ministro israelí de Turismo, Rehavam Zeevi. Shaat dijo a los europeos que no hay razón para que sean procesados en un tercer país, como insinuó Piqué a semejanza de lo ocurrido con los dos libios envueltos en el atentado de Lockerbie. 'Son casos distintos'. Peres tampoco se mostró receptivo a terceras vías: 'El crimen se produjo en territorio israelí y tienen que ser extraditados'. Las dos partes están enzarzadas en una interpretación interesada de los Acuerdos de Oslo.

Shaat solicitó a la UE ayuda de emergencia inmediata para afrontar los daños causados por la ofensiva militar israelí. El Banco Mundial evalúa en más de 300 millones de dólares los daños a las infraestructuras palestinas hasta el fin de diciembre y considera que esa suma se ha podido doblar desde entonces.