'La paz es también una necesidad para los israelíes'
El helicóptero jordano que tendría que sacarle de Ramala tal vez estuviera ya listo, pero en la noche del lunes al martes ni el presidente palestino ni sus ayudantes más cercanos soltaban prenda sobre su eventual viaje a Beirut. A sus 72 años, Yasir Arafat sigue guardando cartas en la manga. 'Lo que diga el Gobierno israelí no me parece muy importante', asegura desafiante. Sin embargo, poco después reconoce que no ha podido viajar a Madrid porque los israelíes se lo han impedido. 'La Intifada ha mostrado que es imposible doblegar la voluntad colectiva del pueblo palestino', declara a EL PAÍS en su despacho sin dejar de atender el papeleo que se acumula sobre su mesa. 'La paz no es sólo para nosotros, sino también una necesidad para los israelíes', subraya convencido. Ni siquiera la ambigüedad de Estados Unidos le desanima: 'Todavía tengo esperanza de que el presidente Bush cumpla lo que inició su padre para alcanzar una paz justa y global'.
'Espero que Bush siga lo que inició su padre para alcanzar una paz justa y global'
'La Intifada ha mostrado que es imposible doblegar la voluntad palestina'
Pregunta. ¿Se siente usted limitado para viajar a Beirut, o a cualquier otro sitio, por las declaraciones de Sharon?
Respuesta. No es algo que me parezca muy importante. Todo lo que dice el Gobierno israelí va contra las normas diplomáticas y contra el texto de los acuerdos firmados entre ellos y nosotros. Viola algunos de los protocolos que hemos firmado desde Oslo.
P. ¿Qué aporta de nuevo la iniciativa saudí para que la cumbre de Beirut haya despertado tantas expectativas?
R. Por primera vez se proyecta un acuerdo árabe total y además ya ha sido aceptado en principio por los ministros de Exteriores de la Liga Árabe en sus sesiones preliminares.
P. ¿Significa eso que se va a dar un paso adelante en la resolución del problema?
R. Es algo nuevo, aunque algunos de sus elementos ya estaban presentes en iniciativas anteriores, el plan Fahed de 1981, con contribuciones egipcias, jordanas y de otras partes que quieren lo mismo: un tratado global con Israel.
P. ¿Requiere eso su presencia en Beirut?
R. He sido consultado en todos y cada uno de los detalles de esta iniciativa a través del mecanismo de cooperación que tengo con Arabia Saudí. Mis ministros estuvieron en El Cairo en las sesiones preparatorias y están ahora en Beirut. Estoy en permanente contacto telefónico con ellos. Por tanto, no me siento alejado de los acontecimientos que tienen lugar en la capital libanesa.
P. Entonces, ¿no vamos a saber hasta el último momento si viaja o no a Beirut?
R. Es una decisión que va a tomar el liderazgo palestino en el momento más apropiado.
P. ¿Cómo interpreta la actitud de Estados Unidos? Por un lado, el vicepresidente Dick Cheney pasa por aquí sin hacerle una visita. Por otro, impulsan la resolución 1.397 del Consejo de Seguridad de la ONU que reconoce el Estado palestino. ¿Ha habido un cambio de actitud o está Washington motivado por otros intereses, como por ejemplo Irak?
R. Cheney me había pedido que me reuniera con él hoy en El Cairo y esta reunión no se produjo. Sólo puedo decir que ha sido aplazada. Por tercera vez, tenemos aquí al general Zinni, como enviado especial del presidente. El secretario de Estado, Colin Powell, me acaba de hablar hace un par de horas por teléfono y está en contacto telefónico conmigo. Efectivamente, la resolución 1.397 es de redacción estadounidense, no es sólo que ellos la hayan presentado. Es su decisión y la valoramos. El tema palestino es algo mucho más profundo como para que pueda ser utilizado superficialmente para cubrir otras cosas. Impone la agenda. Recuerdo siempre que el presidente Bush padre inició la Conferencia de Madrid. Nosotros continuamos el contacto con el presidente Clinton y seguimos esperando que Bush hijo siga estos pasos de un interés genuino de Estados Unidos en la zona. Todavía tengo esperanza de que el presidente Bush cumpla lo que inició su padre para completar una paz genuina, duradera, justa y global en esta zona.
P. Tras un millar de muertos, decenas de miles de heridos, pérdidas millonarias, parálisis económica y social, ¿qué ha traído esta Intifada al pueblo palestino?
R. Ha mostrado que es imposible doblegar la voluntad colectiva del pueblo palestino de conseguir sus derechos. Nuestro pueblo es hoy el único que está bajo ocupación extranjera en el mundo. ¿Es eso aceptable para el mundo? Contamos con una unidad nacional inquebrantable, con un excelente apoyo internacional, del que estamos satisfechos.
P. Ese apoyo no es nuevo. ¿Qué le permite creer que ahora hay elementos para salir del atolladero?
R. La única solución es cumplir lo que está acordado y firmado. ¿Es que todas estas fuerzas internacionales no pueden influir en la posición de Israel? La paz no es sólo para nosotros, sino también una necesidad para los mismos israelíes, para todo Oriente Próximo, y se reflejará la estabilidad mundial.
P. ¿Tiene la Autoridad Palestina capacidad para cumplir las exigencias del plan Tenet en cuanto a recogida de armas ilegales y detención de quienes atenten contra Israel?
R. Hay una gran diferencia entre el texto de lo que es el plan Tenet, lo que acordamos en junio, y lo que hoy dicen los israelíes que es Tenet. Ellos entraron en todas las ciudades y supuestamente recogieron todas las armas. ¿Para qué quieren que yo lo haga de nuevo? Han detenido a miles de personas. ¿Queda alguien por detener? Han destruido las instituciones de seguridad, casas, industrias, la agricultura... Han arrancado el 50% de nuestros olivos.
P. El jueves pasado usted condenó el último atentado, pero desde Israel se duda de su sinceridad porque uno de los grupos atacantes [las Brigadas de Al Aqsa] está vinculado con Al Fatah...
R. No es correcto. Es un pretexto que usan los israelíes para justificar su escalada. Por favor, pregúnteles a los pocos observadores europeos que hay desplegados. Son pocos, pero muy eficientes. Yo confío en su palabra y en el esfuerzo que estamos haciendo para cumplir nuestra parte de los compromisos con Israel. Pero este cierre total... Llevamos 47.000 víctimas, entre muertos y heridos, en los últimos 18 meses, con humillaciones permanentes y diarias en los puestos de control israelíes. Han destruido toda la economía palestina y sus factores de producción. El 66% de la población de Gaza y el 45% en Cisjordania están por debajo de la pobreza...
P. Un prestigioso periódico estadounidense acaba de publicar que la Autoridad Palestina ha firmado un pacto con Irán para que le supla de armas y de dinero. ¿Qué tiene que decir al respecto?
R. No merece ningún comentario. Lo hemos desmentido por activa y por pasiva. Le reitero de una manera categórica no tener ningún tipo de relaciones militares ni ahora, ni antes, ni después con Irán. Y también lo han afirmado todos los responsables del Gobierno iraní. Desafío a que me den una sola prueba de lo que dicen.
P. ¿Sigue convencido de que verá ondear la bandera palestina sobre Jerusalén?
R. Cuando salí de Beirut hace 20 años, me preguntaron adónde iba y respondí que a Palestina. Muchos pensaron que no estaba en mis cabales. Ahora estamos hablando aquí. Y sigo repitiendo que voy a ir a Jerusalén, a Jerusalén oriental, que es parte del territorio ocupado en 1967 y la capital del Estado palestino. Allí están además los Santos Lugares cristianos y musulmanes.
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