Aznar expresará en Beirut el apoyo europeo a la iniciativa de Riad
José María Aznar pronunciará hoy un breve discurso durante la inauguración de la conferencia de la Liga Árabe en Beirut, a fin de expresar, en su calidad de presidente de turno de la Unión Europea, el apoyo de los Quince a la iniciativa de Arabia Saudí. El presidente del Gobierno se convertirá así en el primer europeo que participa en una cumbre panárabe desde los tiempos de T. H. Lawrence, más conocido como Lawrence de Arabia.
La presencia excepcional de Aznar en la cumbre de Beirut responde a una invitación del presidente libanés, Émile Lahud, que será atendida en un viaje de apenas 24 horas. El presidente del Gobierno despegó ayer por la tarde en Rota, ya que se encontraba descansando desde el lunes con su familia en el coto de Doñana, adonde está previsto que regrese esta tarde.
Su discurso está programado para antes del mediodía, inmediatamente después de las intervenciones inaugurales a cargo del presidente libanés, del secretario general de la ONU, Kofi Annan, y del rey Abdalá de Jordania. Luego, Aznar mantendrá algunas entrevistas bilaterales, entre las que estaba prevista la del presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yasir Arafat, que finalmente no se trasladará a Beirut.
Un consenso mínimo
La iniciativa saudí de que los países árabes reconozcan al Estado de Israel en el supuesto de que éste se retire a sus fronteras de 1967, anteriores a la Guerra de los Seis Días, ha creado un punto mínimo de coincidencia entre los países de la Unión Europea, que han manifestado fuertes divergencias en torno al conflicto de Oriente Próximo durante lo que va transcurrido de la presidencia española.
El mes pasado, en el consejo informal de Exteriores celebrado en Cáceres, España no logró sacar adelante una iniciativa francesa orientada al reconocimiento inmediato de un Estado palestino porque Alemania, Reino Unido y Holanda opusieron argumentos basados en la seguridad de Israel muy similares a los que esgrime Washington para marcar su línea de presión sobre Arafat.
Por motivos similares, en el Consejo Europeo celebrado los pasados 15 y 16 en Barcelona no pudo ser aprobado un borrador inicial de declaración que cargaba el acento en la condena de la excesiva represión practicada por el primer ministro israelí, Ariel Sharon, sobre la población palestina.
El plan saudí no ha encontrado obstáculos en Europa por tratarse de una propuesta más genérica que ha sido bien acogida por Washington y ha suscitado el interés de Israel. El ministro de Exteriores, Josep Piqué, destacó ayer que lo importante es que propugna la negociación y lo calificó de 'oportunidad para la paz'.
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