La tasa de paro sube por primera vez desde principios de 1996 y se acerca al 13%

El impacto de la ralentización de la economía en el empleo se agravó a final de año. El último trimestre arrojó datos negativos tanto en los datos de paro como de creación de empleo. La tasa de desempleo se elevó al 12,96%, la primera vez que sube en un trimestre desde el primero de 1996. En los últimos tres meses también se destruyeron 17.400 empleos, con lo que el saldo en el conjunto del año arrojó la creación de 256.000 empleos, más de la mitad que en 2000 (569.400) y la peor cifra desde 1994.

La tasa de paro estaba en el 22,91% de la población activa al final del primer trimestre de 1996, justo antes de que el PP ganase las elecciones. Desde entonces inició una senda de descenso ininterrumpido hasta el 12,77% que tenía en el tercer trimestre de 2001. El aumento hasta el 12,96% experimentado en el cuarto trimestre quiebra esa larga tendencia que ha supuesto reducir la tasa en 10 puntos porcentuales.

Ese agravamiento del paro confirma el impacto que está teniendo la ralentización de la economía en el mercado laboral, según la encuesta de población activa (EPA), dada a conocer ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Se trata de la última EPA que se publica antes del cambio de metodología que dará un vuelco a los resultados de la estadística: las estimaciones indican que el endurecimiento en la definición de parado (sólo es considerado como tal quien haya buscado empleo en el último mes, frente a los tres actuales) eliminará de un plumazo en torno a 350.000 parados (la tasa bajará a algo más del 10%), y otros cambios, más la inclusión de inmigrantes, aumentarán en 1,18 millones los ocupados. La aplicación de esas modificaciones aparecerá en la primera EPA de 2002.

De momento, en la encuesta del último trimestre de 2001 se utiliza el método antiguo. Y, según los datos, la ocupación cae en 17.400 personas, aunque no es la primera vez que se destruye empleo, ya que en el último trimestre de 2000 fueron 10.700 personas menos las ocupadas. Otro dato negativo de ese trimestre fue el aumento del paro, en 33.900 personas, el mayor desde 1993.

Los datos anuales también retrotraen la situación a siete años atrás y la creación de 256.000 empleos a lo largo de 2001 es apenas la mitad de 2000 (569.400) y un tercio de la del año 1999 (699.380). La generación de puestos de trabajo del pasado año es la más desfavorable desde 1994.

La evolución del paro también es peor que la de años pasados. En el conjunto de 2001 tan sólo descendió en 88.400 personas, un tercio menos que en 2000 (260.200), la quinta parte que en 1999 (401.400) y el dato más negativo también desde el año 1994. Con ello, la cifra total de parados se sitúa en 2.213.400 personas, mientras que los activos (de más de 16 años) llega a 17.080.300 (sube en 167.700) y la de ocupados a 14.866.900.

Son especialmente preocupantes los datos de Cataluña. El retroceso en esta comunidad, según los expertos, es un reflejo de lo que puede ocurrir en trimestres posteriores en otras menos industrializadas. Con el 20% del producto interior bruto (PIB) español, Cataluña actúa siempre de locomotora en los cambios de ciclo y acostumbra a ser la primera en entrar en crisis y la primera en superarlas. En Cataluña se ha producido una fuerte destrucción de empleos en el trimestre (52.600) y, lo que es más significativo, en el conjunto del año (43.900). Además, el paro aumentó en los dos periodos (7.500 en el trimestre y 6.000 en el año).

También han perdido empleo Extremadura (6.600), Asturias (4.500), Galicia (2.300), Ceuta (1.300) y Baleares (800). En el pasado trimestre, las mayores caídas, además de Cataluña, se dan en Baleares (21.100), Galicia (14.800) Asturias (11.400), País Vasco (8.500) y Castilla y León (5.100).

Los aumentos más fuertes del paro en 2001 se producen en Canarias (10.200) y el citado de Cataluña. En el cuarto trimestre, corresponden a Madrid (18.100), Andalucía (7.700), Galicia (6.300) y Castilla y León (4.800).

La tasa de paro femenina (18,66%) sigue duplicando la de los hombres (9,08%), pese a que las mujeres se benefician de una mayor creación de puestos de trabajo y una mayor reducción del paro.

El sector que tiene una evolución más negativa es la industria (destruye 44.500 empleos en el año y 48.500 en el trimestre), mientras que los servicios, pese a la mala racha trimestral en la que pierden 11.400 puestos, en el año ganan 234.000. La destrucción de empleos del pasado trimestre afecta fundamentalmente a los asalariados con contratos temporales (con una caída de 33.700), frente a un aumento en los fijos (15.000). Con ello, la tasa de temporalidad baja dos décimas, hasta el 31,7%. En el año también es mejor el dato de asalariados fijos (crece en 166.200) que de temporales (77.500 más).

En la duración de la jornada, se registra una caída trimestral en la duración a tiempo completo (38.200) y un destacado incremento anual (203.100). El contrato a tiempo parcial mantiene un avance muy lento: 20.800 en el trimestre y 52.900 en el año.

La cifra de hogares con todos sus miembros en paro, por primera vez desde el primer trimestre de 2001, ha vuelto a rebasar la barrera de los 500.000 (hasta 502.200) tras el aumento de 9.100 que se ha producido en el pasado trimestre.