La tragedia del Nyiragongo vista desde un helicóptero
La gigantesca fisura abierta en la boca del volcán Nyiragongo ha escupido desde el pasado jueves una lengua de magma anaranjado que se convirtió en un río de lava que avanzó lentamente sobre la ciudad de Goma. A bordo de un helicóptero, un equipo de televisión de la agencia Reuters viajó sobre el cráter de rocas fundidas de color rojo intenso que se desbordó por los flancos de la montaña, se volvió negruzco conforme atravesó los labios del volcán, para abrirse camino a través de una fisura de 500 metros de largo y descender por la colina.
Tras dejar una herida de devastación ardiente de cinco kilómetros, la lengua de lava engulló una gran hilera en la jungla hasta iniciar su camino de destrucción a través de Goma, una ciudad situada en el este de la República Democrática de Congo, cerca de la frontera con Ruanda.
Cada minuto que pasaba, la lechada negra se adentró más y más en la ciudad, abrasando casas y llenando el aire de briznas ardiendo y de sulfuro. Las rocas fundidas se hundían en el lago Kivu y levantaban nubes de vapor que se alzaban en el cielo varios centenares de metros sobre el nivel de las aguas.
La erupción ha machacado las colinas que rodean Goma y ha provocado profundos agujeros en la tierra volcánica negra de este país de África central, enclavado en la región de los Grandes Lagos. La erupción ha causado un segundo y mucho más largo abismo entre Goma y el volcán.
