La misteriosa ausencia de los herbívoros

La mayoría de las huellas de dinosaurio del yacimiento de Los Cayos (La Rioja) -y de otros muchos en el mundo- son de carnívoros. 'Se distinguen fácilmente: los dedos tienen forma de V, acaban en punta, con la garra, y la huella es asimétrica', explica Joaquin Moratalla. 'Las marcas de herbívoro son simétricas, y los dedos, redondeados'. En el Museo de Ciencias Naturales de Arnedo (La Rioja), con fondos de la Sección de Mineralogía y Paleontología de Iberdrola, hay réplicas de huellas y se aprecia la diferencia de forma.

'Al tratar de recontruir la comunidad biológica que habría aquí ves que algo falla: ¿dónde están los herbívoros? ¿Sería posible que las comunidades de dinosaurios tuvieran más depredadores que presas?', se plantea Moratalla.

Dos hipótesis explicarían la relativa escasez de huellas de herbívoros. Una recurre a una supuesta preferencia ambiental de los depredadores por las zonas donde más fácilmente se forman y conservan huellas. La otra idea tiene que ver con la movilidad de los dinosaurios. 'Los depredadores se mueven más que los herbívoros. Un animal sólo produce un esqueleto, pero el número de huellas que puede dejar depende de su actividad y es posible que los carnívoros se movieran mucho más que los herbívoros'.