La Generalitat sacrificará los cerdos afectados por el nuevo brote de peste pero aumentará las ayudas

No hay vuelta de hoja. La Generalitat sacrificará todos los cerdos afectados por el nuevo brote de peste porcina clásica aparecido en Bellmunt como hizo en los anteriores casos. Los agricultores que mantienen bloqueada una granja de Bellmunt serán desalojados si siguen impidiendo el sacrificio de los 132 animales. El Departamento de Agricultura ha logrado el apoyo del sector a sus medidas a cambio de nuevas ayudas a los afectados. Éstas supondrán hasta 20.000 pesetas por cada cerda reproductora sacrificada desde el 14 de junio.

La Generalitat mantiene el perímetro de control de 10 kilómetros para determinar el foco, como ha hecho con otros brotes. Desde junio se han sacrificado en la provincia de Lleida 68.000 cerdos, de los que alrededor de 2.300 son reproductoras. En la anterior crisis de peste porcina, que se desató en 1996, se sacrificaron un millón de animales.

Las nuevas ayudas por las cerdas reproductoras son compatibles con las ya existentes de 50.000 pesetas por cada animal sacrificado.

Las ayudas al sector acordadas ayer por el Departamento de Agricultura son mayores para las pequeñas explotaciones. Así, las que tengan hasta 50 cerdas reproductoras percibirán 20.000 pesetas por cada sacrificio y las más grandes, que tienen más de 300, percibirán 12.000 pesetas por cada animal sacrificado. Estas ayudas las podrán reclamar las explotaciones que han tenido que sacrificar cerdas reproductoras o madres desde junio pasado, en total 27, según el consejero de Agricultura, Josep Grau.

Agricultura exigirá a las explotaciones que se acojan a las nuevas medidas 'que sigan con la explotación', afirmó Grau. El consejero dijo que el resto de las condiciones para obtener las ayudas se fijarán en una orden del departamento que se publicará la próxima semana.

El secretario general de Unió de Pagesos, Joan Caball, y el presidente de la organización sectorial Joves Agricultors i Ramaders de Catalunya (JARC), Francesc Pascual, respaldaron las propuestas presentadas por Agricultura. Los representantes del sector convocarán una asamblea para decidir el desbloqueo de la granja de Bellmunt. El propio consejero de Agricultura descartó medidas de fuerza y apeló a la 'sensatez' del sector.

Entretanto, los ganaderos mantuvieron ayer, por segundo día consecutivo, el bloqueo del camino de acceso a esta granja de Bellmunt para impedir que los técnicos del Departamento de Agricultura sacrificasen las 132 cerdas reproductoras que alberga. Los propietarios de la granja, situada a 680 metros del foco declarado la semana pasada en esa localidad, han presentado un recurso contra la orden de sacrificio argumentando que los animales no están enfermos.

'La situación es tensa y los veterinarios de Agricultura sólo entrarán por la fuerza', declaró ayer uno de los granjeros que formaban parte del retén que vigila por turnos la explotación de Bellmut. Sus propietarios, Dídac García y Anna Maria Valls, exigen que se efectúen nuevos análisis de sangre a los animales para comprobar si están enfermos. 'Si lo están, seremos los primeros en facilitar el trabajo de los veterinarios', señalaron. La de Bellmunt es la única granja que queda con animales vivos dentro del radio de un kilómetro del foco.

En el recurso presentado, los granjeros cifran en 10 millones de pesetas el perjuicio económico que les ocasionará el vaciado de la explotación.

La cantidad que reclaman dista mucho de la que percibirán por el procedimiento normal, ya que la Administración pagará los animales a precio de mercado, sin prever ninguna compensación por el periodo improductivo, que en el caso de explotaciones de reproductoras suele ser de dos años.

Discrepancias

En los últimos días ha habido discrepancias entre el Departamento de Agricultura y los afectados sobre las indemnziaciones que cobrarán. El responsable del porcino del sindicato agrario Unió de Pagesos, Rossend Saltiveri, dijo: 'Agricultura no puede pedir que seamos solidarios cuando las indemnizaciones que nos paga no son dignas'. Unio de Pagesos ha venido reclamando 3.500 pesetas mensuales por cerda durante el tiempo que la granja esté improductiva. Agricultura, en cambio, descarta otorgar ayudas por el tiempo que las explotaciones estén improductivas y sólo acepta indemnizar por cada animal sacrificado.