Hewlett Packard crea un gigante de la informática al comprar Compaq por 4,5 billones

Es la unión de dos empresas en situación difícil. Pero creará un gigante con una facturación sólo ligeramente inferior a IBM. Hewlett Packard, el segundo fabricante mundial de ordenadores, anunció ayer la compra de su rival Compaq por unos 25.000 millones de dólares (4,5 billones de pesetas) y revolucionó un sector en plena crisis. La fusión de ambas compañías comportará unos 15.000 despidos, además de los casi 15.000 que ya tenían previsto efectuar por separado, y planteará problemas a las autoridades antimonopolio de Estados Unidos y la Unión Europea.

HP pagará 0,63 acciones propias por cada una de Compaq, lo que representa una prima del 19% para los accionistas de la empresa absorbida. Ello supondrá que los accionistas de HP tengan el 64% de la sociedad resultante, que mantendrá el nombre Hewlett Packard y la sede en Palo Alto (California). Carly Fiorina será la presidenta ejecutiva, y Michael Capellas, hasta ahora máximo responsable de Compaq, ocupará una presidencia de tipo más representativo. Según Fiorina, el acuerdo entre HP y Compaq se alcanzó casi por casualidad. 'Estábamos hablando sobre la posibilidad de compartir algunas patentes y ¡bum!, la discusión se hizo global, empezó a crecer', explicó, 'y ya no se frenó. Todo tenía sentido desde un punto de vista estratégico'. La Bolsa castigó las acciones de HP, que cayeron a un mínimo de cinco años al retroceder el 18,6% (4,32%). Compaq, al contrario, subió el 4,4%.

Golpe maestro

El de ayer puede ser el golpe maestro de Carly Fiorina, la criticada presidenta de Hewlett Packard (HP), que llevaba meses resistiendo el acoso de unos accionistas alarmados por la pérdida de rentabilidad y por el rumbo aparentemente errático de la empresa. Hace unos meses, cuando se frustró la adquisición de la consultora PricewaterhouseCoopers por parte de HP, cundió la impresión de que Fiorina carecía de planes estratégicos. La presidenta llegó a pensar incluso en abandonar la fabricación de ordenadores y concentrarse en productos periféricos. La absorción de Compaq, si es autorizada por las autoridades antimonopolio, colocará sin embargo a HP en pie de igualdad con IBM y en situación hegemónica en el comercio detallista, con una cuota de mercado superior al 70%. Además, le otorgará el liderazgo en el explosivo segmento de los ordenadores de bolsillo, en el que Compaq es puntera y apenas puede atender la enorme demanda.

IBM tiene unas ventas anuales de 101.700 millones de dólares, frente a los 87.400 millones que suman HP y Compaq. La compañía fusionada se quedará con 135.000 empleados tras los ajustes anunciados, con lo que su plantilla supondrá la mitad de la de IBM. Del total, 1.240 trabajan en España (600 en Sant Cugat de HP y 640 en Compaq, en Madrid).

Con el ordenador convertido en un producto de consumo masivo, la clave está en los precios y, en principio, HP dispondrá de menores costes laborales que IBM. Pero Big Blue sigue siendo el rey en el segmento más rentable del negocio, la instalación de sistemas integrados para empresas. Y, en materia de costes, nadie puede competir con Dell, la estrella emergente, que vende a través de Internet y fabrica conforme llegan los pedidos, lo que le permite ahorrarse la estructura comercial y los gastos de almacenaje. 'Hará falta mucho tiempo para saber si la operación es buena o mala', comentó Patrick Shields, analista de Paribas.

'En un momento especialmente estimulante para el sector, esta fusión nos concederá el liderazgo; con nuestros clientes y socios, determinaremos la dirección de esta industria en los años venideros', declaró Fiorina. Por el momento, el entorno es muy negativo. Las ventas de ordenadores han caído por primera vez en 15 años, y, en el caso de HP, las ventas se han reducido este año un 19% respecto al anterior. Hay que contar, adicionalmente, con serias objeciones monopolísticas. Dado que IBM y Dell venden por encargo, los productos HP se encontrarán casi en solitario en los comercios, donde su cuota de mercado rondará el 70%. Además será el líder mundial en ordenadores personales, miniordenadores e impresoras.

Las autoridades de Washington y sobre todo la cada vez más dura Comisaría de la Competencia de la Unión Europea (que bloqueó recientemente la absorción de Honeywell por General Electric) se fijarán mucho en la nueva posición dominante de HP. 'Calculamos que el proceso de aprobación durará unos nueve meses, pero no esperamos dificultades insalvables por parte de las autoridades antimonopolísticas', declaró Carly Fiorina.