El partido de Kostunica abandona la coalición de Gobierno en señal de protesta
El primer ministro de Yugoslavia, Zoran Zizic, dimite por la entrega del ex gobernante
La extradición de Milosevic ha desencadenado la crisis en el Gobierno de Yugoslavia con la dimisión del primer ministro Zizic. Además, ha abierto una grieta en la coalición de 18 partidos, grupos y grupúsculos de la DOS, que gobierna en Serbia. El DSS de Kostunica ha anunciado que rompe la coalición en el Parlamento serbio. El partido formará grupo parlamentario propio, con sus 46 diputados de los 176 que tiene la DOS. Al mismo tiempo, el DSS pide reorganizar el Gobierno de Serbia, donde exige más carteras.
El montenegrino Zizic confirmó su esperada dimisión del cargo de primer ministro federal tras entrevistarse con Kostunica. Zizic justificó su dimisión por el desacuerdo con la cooperación con el Tribunal Penal Internacional para los crímenes en la antigua Yugoslavia. El SNP de Montenegro fue fiel vasallo de Milosevic hasta las elecciones federales del pasado 24 de septiembre, que supusieron el inicio de la caída del déspota. A la derrota en las urnas de aquel día siguió su derribo en las calles de Belgrado, el 5 de octubre. El SNP inició el desenganche de su antiguo líder, pero no hasta el extremo de dar su bendición a la extradición a La Haya de su antiguo líder.
El SNP montenegrino frenó la aprobación de una ley en el Parlamento de Yugoslavia para aprobar la interpretación de la constitución que permitiese la extradición de Milosevic. Esta obstrucción del SNP en el Parlamento obligó a la DOS, con la oposición de Kostunica, a aprobar a toda prisa el pasado sábado un decreto de más que dudosa constitucionalidad. Los ministros montenegrinos no asistieron a la reunión del gabinete que aprobó el decretro.
La decisión del Gobierno de Serbia, con su primer ministro Zoran Djindjic como hombre fuerte de la nueva situación, de ignorar la decisión del Tribunal Constitucional, formado por jueces de la época de Milosevic, de suspender el decreto y también su aplicación, ha indignado al SNP. La clientela del SNP en Montenegro se compone de seguidores de Milosevic y fervientes partidarios de la continuación de la unión con Serbia bajo el marco de Yugoslavia. Con la vista puesta en sus seguidores montenegrinos, al SNP no le quedó otra que romper la unión casi contranatura que mantenía con la DOS en el Gobierno federal de Yugoslavia.
Al anunciar su dimisión ayer, Zoran Zizic, un profesor de Derecho en la ciudad de Podgorica que recuerda una visita a Madrid en la que conoció a Alfonso Guerra, declaró: 'Como ministro y jurista, no me puedo asociar a una violación abierta de los derechos elementales garantizados por la Constitución'. Añadió Zizic que había apelado a Kostunica para que preserve Yugoslavia y dijo que el lunes el presidente iniciará consultas para formar nuevo gobierno.
Mayor protagonismo Por su parte el partido de Kostunica 'condena, de la forma más vigorosa, las amenazas contra el orden constitucional y las tensiones provocadas en el seno de la sociedad por la decisión irresponsable del Gobierno de Serbia, adoptada a pesar de la oposición del DSS'. Los seguidores de Kostunica anuncian que sus diputados van a exigir una reconstrucción de los Gobiernos de Serbia y Yugoslavia, en los que reclaman un mayor protagonismo. Esto anticipa nuevos conflictos dentro de la DOS.
El enfrentamiento entre las dos figuras clave del derrocamiento del régimen despótico, Kostunica y Djindjic, ha quedado abierto y ha salido de la alfombra toda la basura barrida debajo en los últimos meses. Algunos analistas en Belgrado creen que a Kostunica le espera el destino de convertirse en una especie de Gorbachov serbio, el hombre que hizo posible el cambio de régimen y fracasó después en la democracia. No obstante, Kostunica puede heredar el voto nacionalista de Milosevic, que se ha quedado sin padre, y sentarse a esperar el posible fracaso del hoy triunfante Djindjic.
La extradición de Milosevic ha provocado más tormenta política que en las calles Ayer sólo unos 5.000 seguidores del derrocado déspota se manifestaron en Belgrado para protestar.
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