Padres de alumnos logran censurar en escuelas mexicanas obras de Fuentes y García Márquez
La lectura de las páginas de Aura, de Carlos Fuentes, en la que dos enamorados yacen bíblicamente y se musitan al oído ternezas y quereres, sublevó a nueve padres de familia de un colegio religioso mexicano, entre ellos el ministro de Trabajo, Carlos Abascal, y causó el apartamiento de la profesora que promovió la lectura en sus clases de literatura. 'Hice valer mi derecho a vigilar lo que lee mi hija', justificó el funcionario. Las alumnas del aula sometida a censura tienen edades en torno a los 15 años
Igualmente fueron censurados Doce cuentos peregrinos, de Gabriel García Márquez, también escogidos por la profesora María Georgina Rábago para adentrar a sus escolares en la prosa de excelencia. El acta administrativa argumenta la incompatibilidad existente entre los dos libros y los valores éticos del instituto para mujeres Félix de Jesús Rougier. No es la primera vez que el conservadurismo del ministro es noticia y semanas atrás levantó ampollas al aconsejar a las mujeres abrazar su vocación de madres y las tareas del hogar, sugiriendo que ésa es la razón fundamental de su existencia.
Subrayado con rotulador amarillo fosforescente, sentenciado de antemano, compareció ante los tribunales del oscurantismo este párrafo del sobresaliente escritor mexicano: 'Felipe cae sobre el cuerpo desnudo de Aura, sobre sus brazos abiertos, extendidos de un extremo al otro de la cama, igual que el Cristo Negro que cuelga del muro de su faldón de seda escarlata, sus rodillas abiertas, su costado herido, su corona de brezos montada sobre peluca negra, enmarañada, entreverada con lentejuela de plata'. Prosa poética la de Fuentes, casi sublime en la insinuación del ayuntamiento carnal, la tutela paterna encontró en ella acicates peligrosos hacia la lascivia, aberraciones y razones suficientes para la expeditiva llamada a capítulo de la profesora de español de 23 años.
'No ha sido despedida y continúa colaborando', subrayó la dirección del centro. El censor escribió en el oficio de apercibimiento que 'en los libros de texto de la asignatura Español II y III se menciona los nombres de Fanz Kafra (sic), Goethe y Horacio Quiroga, mas no se pide la lectura de las obras que menciona, ni están en el programa'.
Leer a Cicerón
Carlos Fuentes y Gabriel García Márquez se reían ayer de la reacción de Carlos Abascal, informa Ricardo Martínez de Rituerto. El escritor mexicano, que se encuentra en la Universidad de Brown de Providence para un ciclo de conferencias organizado por el Proyecto Trasatlántico, recibió por la mañana una llamada de García Márquez en la que le decía: 'Ya sabes que ahora vamos a vender más libros'. El novelista mexicano se tomó a broma la censura del ministro Abascal, que calificó de 'absurda'. Ante la recomendación del ministro de que su hija leyese a Cicerón, Pereda, el padre Coloma y Julio Verne, Fuentes señaló, ya en serio: 'El secretario Abascal debería leer a Cicerón para aprender retórica. Él es quien necesita educarse'.
Babelia
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