Barcelona da su nombre a un vino para promocionar la identidad de la ciudad

El Ayuntamiento de Barcelona puso ayer en marcha el proyecto para crear el Vino de Barcelona que, bajo la denominación de origen Cataluña, tiene como objetivo promocionar la identidad de la ciudad. La finca de Can Calopa, situada en la sierra de Collserola, ha sido la elegida para llevar a cabo la plantación del vides, cuya calidad se comprobará con una cata oficial en el año 2004.

El alcalde de Barcelona, el socialista Joan Clos; el director general del Instituto Catalán del Vino, Domingo Valiente; la cuarta teniente alcalde, Inma Mayol, y el rector de la Universidad Politécnica, Jaume Pagès, plantaron ayer las primeras cepas en la finca, cuya producción se calcula que llegará a ser de entre 18.000 y 20.00 botellas por año.

El enólogo asesor del proyecto, Josep Lluís Pérez, explicó que el objetivo de la plantación es recuperar el vino tradicional mediterráneo, que se encuentra entre los paralelos 42 y 38, ya que la mayoría de las cepas actuales provienen de los países del norte, situados por encima del paralelo 43. Pérez reconoció que el proyecto será difícil y añadió que se quiere conseguir un vino joven y de calidad, para lo que hará falta esperar, según la opinión del enólogo, entre 10 y 15 años para lograrlo.

Las dos primeras cepas que se han plantado en Can Calopa son de las variedades garnacha (propia del Mediterráneo occidental) y syrah (del oriental), aunque en el futuro se prevé plantar variedades del Mediterráneo central como sangiovese o agliánico. El Vino de Barcelona se convertirá entonces en un vino típicamente mediterráneo, pero con una mezcla propia y específica. Una parte de la producción se servirá en las recepciones oficiales del Ayuntamiento de Barcelona y en las fiestas populares relacionadas con la cultura del vino. El resto se destinará a la difusión de la filosofía en defensa de la tipicidad vinícola mediterránea.

El proyecto ha recibido, sin embargo, algunas críticas. Entre ellas, destaca la realizada por el presidente del grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Santiago Fisas. El edil popular califica la idea de la creación del Vino de Barcelona como 'otra forma de lucimiento personal de Clos', mientras que el portavoz de CiU en el consistorio, Joan Puigdollers, afirma 'no entender' la 'megalomanía' del alcalde 'por tener una viña'. 'Tenemos la sensación de que Clos pierde el tiempo', sentencia Puigdollers.