El PSOE pide un delegado provisional en la Zona Franca

Cuatro días después de presentar su dimisión 'irrevocable' como delegado especial del Estado en la Zona Franca de Cádiz, Manuel Rodríguez de Castro (PP), sigue al frente del organismo, gestionando las cuestiones pendientes y trabajando 'con cierta normalidad', según distintas fuentes del Consorcio. El PSOE ha reclamado que se nombre un delegado provisional y el PP defendió la continuidad del actual hasta que sea sustituido. Rodríguez de Castro, menos ayer, ha acudido todos los días al despacho y ha seguido al frente de la institución.

El secretario provincial del PSOE, Francisco González Cabaña, criticó ayer la continuidad del delegado: 'Si ha presentado su dimisión irrevocable debería haber abandonado el cargo, y no lo ha hecho. Lo que cabe es el nombramiento transitorio de uno de los vocales como presidente en funciones. Dimitir y seguir como presidente en funciones nos parece impresentable'.

Mientras llega el relevo, Rodríguez Castro mantiene abierta una investigación interna para esclarecer qué trabajadores han filtrado supuestamente documentos a los medios. En el seno del organismo fiscal existe el temor a que Rodríguez de Castro practique 'una caza de brujas' antes de abandonar definitivamente el cargo.

El delegado presentó su dimisión el lunes, al sentirse víctima de una persecución política y personal similar a la de Matías Conde, el diputado del PP al que el PSOE le atribuyó una frase xenófoba que, en realidad, había pronunciado un parlamentario socialista. Aún siguen sin aclararse los gastos de 220 millones de pesetas en restaurantes, viajes y otras partidas de esa naturaleza, según ha confirmado oficialmente el Gobierno. Además, no se ha aclarado si desde su despacho ha gestionado sus empresas privadas ni porqué la Zona Franca le pagó dos auditorías privadas. Tampoco se han desglosado los 37 millones de pesetas que pagó con sus tarjetas de crédito.

Por otra parte, la Dirección General del Ministerio de Administraciones Públicas (MAP) remitió a Cabaña un informe 'exculpatorio' sobre las actividades de Rodríguez de Castro, quien ha compatibilizado su cargo público con la administración de cinco empresas privadas. 'Se ha acreditado que no ha realizado en las sociedades mercantiles privadas que constituyen su patrimonio personal actividad alguna distinta a la mera administración del mismo', se explica en el documento, que el PSOE estudia llevar a los tribunales.