_
_
_
_

La UE plantea una prórroga de dos años para la OCM del aceite

Bruselas pretende prorrogar la actual Organización Común de Mercado (OCM) para el aceite de oliva, una propuesta que deberá aprobar esta semana el Colegio de Comisarios. Este planteamiento coincide en lo fundamental con las peticiones de la Administración española y una parte del sector olivarero como Asaja y la Confederación de Cooperativas. La Unión de Pequeños Agricultores (UPA), en cambio, reclama una prórroga de un año para aprobar la OCM bajo presidencia española.

Control del olivar

De acuerdo con los compromisos asumidos en el año 1998 con motivo de la aprobación de la OCM para el aceite de oliva, la Comisión debía presentar una propuesta antes de fin de año (la actual expira en noviembre de 2001). Esta propuesta la aprobará el próximo miércoles el Colegio de Comisarios, para iniciarse posteriormente una negociación con el sector. En España, hasta hace unos meses, el Ministerio de Agricultura era el único que se mostraba partidario de aplazar la reforma. Posteriormente se sumaron a esta posición Asaja y la Confederación de Cooperativas, mientras UPA solamente apoyaba una prórroga de un año y COAG la rechazaba. La UPA considera conveniente aprobar la OCM del aceite durante la presidencia española y antes de que se produzca la ampliación de la Unión Europea hacia los países del Este.

Para la UPA, una prórroga de dos años es negativa en cuanto supondría problemas para las explotaciones marginales, que no podrían competir con las actuales reglas del juego en el sector.

En España, primer país comunitario en producción de aceite de oliva, el sector reclamaba una vuelta al anterior sistema de intervención, algo imposible si se tiene en cuenta que la filosofía comunitaria tiene entre sus objetivos eliminar tanto precios como compras de intervención en todos los mercados.

La propuesta comunitaria de minirreforma se concreta especialmente en los siguientes puntos: controles, clasificación de los aceites y reorganización financiera. El modelo que sugiere la Comisión no ha supuesto ninguna sorpresa para el sector. Se esperaba una prórroga y la posibilidad de cambios en todo lo referido a las nuevas denominaciones para el aceite.

En materia de controles, la propuesta quiere que se intensifiquen los trabajos para finalizar el Sistema de Información Geográfica (SIG), encaminado a saber exactamente cuál es el olivar comunitario, sus superficies y producciones. Los trabajos desarrollados en los dos años precedentes no han ofrecido los resultados esperados, especialmente para el sector español, en cuanto no han clarificado las cifras correspondientes a otros países como Italia, donde su producción oficial se halla muy por encima de sus cuotas. Para Bruselas, es fundamental que funcione el SIG para saber cuál es el olivar comunitario.Junto a los mayores controles en la producción, Bruselas pretende también un mayor control en el envasado y la comercialización. No se van a permitir ventas al minorista con envases superiores a los cinco litros, se van a endurecer las exigencias sobre el etiquetado y se quieren impulsar los trabajos de investigación para detectar el fraude en el aceite de oliva.

En política de denominaciones, Bruselas abre con su propuesta la polémica. Frente a la situación actual, se elimina el aceite virgen fino y se mantienen las denominaciones de aceite virgen extra hasta 0,8 grados, el aceite virgen normal hasta un máximo de 2 grados y el aceite lampante. Para el aceite mezcla de virgen y refinado, que actualmente se conocía como aceite de oliva, la UE propugna que se llame aceite de oliva estándar, algo contra lo que se van a movilizar los industriales envasadores. Este colectivo domina actualmente el mercado con este tipo de producto y lo utilizan para operar con sus marcas más importantes.

Finalmente, un tercer punto de interés en esta propuesta es abrir la posibilidad de que una parte de las ayudas comunitarias a la producción pueda ser administrada por cada Estado miembro. Estas ayudas estarían destinadas a actuaciones como gestión de mercados o mejora de la calidad. La propuesta no aborda el mantenimiento o la eliminación de la ayuda al sector en función de las producciones o su cambio por ayuda por superficie o por árbol.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_