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La tuberculosis disminuye en Barcelona el 10%, pero crece en el Raval y otros 10 barrios

Miquel Noguer

Más inmigrantes afectados

La tuberculosis afecta cada vez a menos personas, pero se resiste a desaparecer. Esta enfermedad, vinculada tradicionalmente a la pobreza y a la marginalidad, afectó el año pasado a 590 personas en Barcelona, el 10% menos que en 1998. Pese al descenso de casos diagnosticados, la prevalencia de la enfermedad ha crecido en el Raval, la Zona Franca y otros 10 barrios. El perfil del enfermo tuberculoso es el de un hombre de entre 25 y 44 años con antecedentes de seropositivo o de haber estado en prisión. Las duras condiciones de vida de muchos inmigrantes han incrementado la afectación entre este colectivo.Los responsables del Instituto Municipal de la Salud (IMS) de Barcelona atribuyen el descenso de casos de tuberculosis al riguroso control sobre la enfermedad que se ejerce a través de un programa en el que participan todos los centros de salud en colaboración con los servicios de atención a los drogodependientes, enfermos de sida y los centros peniteciarios. El director del IMS, Antoni Plasencia, considera que el sistema está resultando efectivo: "Desde 1990, el descenso de casos ha sido constante".

A pesar de esta mejora, algunos barrios han continuado con una tendencia al alza. Entre ellos se encuentran el Raval y el Eixample. También en la Zona Franca se ha detectado un aumento de casos, así como en Sant Andreu, Vilapicina, Ciutat Meridiana y Trinitat Vella. Según el Informe de la Tuberculosis en Barcelona, la prevalencia de la enfermedad ha crecido en 12 barrios y ha disminuido en 24. En otros dos barrios el número de casos detectados se ha mantenido igual.

Antoni Plasencia cree que el aumento de diagnósticos de tuberculosis en el Raval, cifrado en el 33%, obedece a que en este barrio y en algunos otros de la ciudad hay "mayor incidencia de casos de drogodependencia y sida". Esta última enfermedad afectaba al 15% de las personas que en 1999 sufrieron tuberculosis. Pero el director del IMS niega que la enfermedad sólo pueda afectar a personas en condiciones sociosanitarias deficientes. "La fotografía de la tuberculosis como una enfermedad del siglo XIX y de gente castigada por la vida no es una imagen real". "Es una enfermedad infecciosa, y como tal puede afectar a todo el mundo".

La tuberculosis está causada por un bacilo que se transmite principalmente por vía aérea, a través de las gotas de saliva que se desprenden de la tos, al hablar o al estornudar. Sin embargo, sólo se produce el contagio cuando existe un contacto duradero con un afectado. Actualmente, 39 de cada 100.000 barceloneses están afectados por la tuberculosis. Este índice es ligeramente superior al del conjunto de España, donde la enfermedad afecta a 35 de cada 100.000 habitantes.

El director del SMS considera que en los próximos años "habrá que incrementar la atención sanitaria hacia los inmigrantes". Las duras condiciones de vida que sufren muchos de ellos los hacen especialmente vulnerables a la enfermedad. El año pasado, los casos de tuberculosis entre extranjeros aumentaron el 22%. Pero no sólo las condiciones de vida en Barcelona influyen en la propagación de la tuberculosis entre los inmigrantes. Muchos de ellos proceden de países en los que esta enfermedad afecta a más del 30% de la población.

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Sobre la firma

Miquel Noguer
Es director de la edición Cataluña de EL PAÍS, donde ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional. Licenciado en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona, ha trabajado en la redacción de Barcelona en Sociedad y Política, posición desde la que ha cubierto buena parte de los acontecimientos del proceso soberanista.

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