Collins el precavido
Francis Collins, de 50 años, un químico especializado en genética humana, se hizo cargo del Proyecto Genoma Humano público en 1993, poco después de que el codescubridor del ADN James Watson abandonara el proyecto ante la intención, expresada por los Institutos Nacionales de la Salud de EE UU, de patentar los datos crudos de la secuencia.Científicos de 18 países han trabajado en el proyecto público, y Collins no es precisamente el más brillante de ellos. Hombre de fervientes convicciones religiosas, su principal contribución ha consistido en prevenir continuamente contra los peligros que entraña el avance de la genética. Su radical oposición a la explotación comercial de los datos del genoma ha sido, durante los últimos meses, el principal obstáculo para un acuerdo con Celera.
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