Maragall cree que si Cataluña no reacciona, en 15 años Madrid la superará incluso en población

Si las tendencias actuales se mantienen, dentro de 15 años la comunidad autónoma de Madrid tendrá más habitantes que Cataluña. Es el augurio que el líder de la oposición al Gobierno de CiU, Pasqual Maragall, expuso la semana pasada al presidente Jordi Pujol para reclamarle un giro a ciertos aspectos de su política. Maragall procura no ser alarmista ni pesimista, pero en los últimos meses reitera una y otra vez que Cataluña sufre una verdadera "hemorragia" de poder económico, que terminará por alejarla de la tan cacareada condición de "máquina de tren" de la economía de España.

Pujol suele comparar el crecimiento de la economía catalana con el de la española y el promedio de la Unión Europea para demostrar que Cataluña crece más. Y para concluir que, por lo tanto, está bien orientada y bien gobernada. Pero lo cierto es que los 20 años de gobierno de Pujol no han conseguido detener el proceso de concentración de poder económico en Madrid en detrimento del que radica en Cataluña.Maragall sacó el asunto a debate la semana pasada en el Parlament. Partió de los datos sobre crecimiento del empleo. Explicó que en 1999 la comunidad de Madrid ocupó a 130.000 personas más que el año anterior, mientras en Cataluña esa cifra fue de 90.000 personas. En el periodo 1994-1999, Cataluña pasó de ocupar a dos millones de personas a tener a 2,4 millones empleadas, un 17% más. La comunidad de Madrid pasó de 1,6 millones de ocupados a 2,1 millones, un 26% de incremento.

Maragall concluyó que si esta tendencia se mantiene, en unos 15 años la comunidad de Madrid tendrá no sólo más ocupados, sino también más población, porque ambos factores están directamente relacionados. Y el volumen de población es en sí mismo un factor de desarrollo económico.

La comparación entre los datos económicos y sociales de Cataluña y los de la Comunidad de Madrid es muy inhabitual entre los políticos catalanes. Los nacionalistas hablan mucho de Madrid como sede del poder político español y sinónimo de su adversario. Pero desde hace 20 años la Comunidad de Madrid tiene también un gobierno regional que ha hecho muchas cosas distintas de las que ha llevado a cabo el de Barcelona.

Los socialistas catalanes, que desde 1979 dirigen el gobierno municipal de izquierdas de la ciudad de Barcelona, consideran que la comunidad autonóma de Madrid se ha beneficiado enormemente de que sus gobiernos regional y municipal hayan colaborado activamente en la promoción económica de la región, sumando, claro está, su iniciativa a las decisiones e inversiones del Estado en ella. Maragall llama ahora la atención en particular sobre la decidida actuación del Gobierno regional de Madrid en la extensión de la red de metro y en la potenciación de la Feria de Muestras. En Madrid la red del metro ha pasado de 112 a 172 kilómetros entre 1997 y 1999. En Barcelona se mantiene prácticamente estancada: en este mismo periodo ha pasado de 119 a 129 kilómetros.

Respecto a la Feria de Muestras de Madrid, Maragall destaca que el Gobierno regional de Madrid actúa de común acuerdo con la Cámara de Comercio y ha invertido 30.000 millones de pesetas en ella. El resultado es que la ha dotado de unas grandes instalaciones que le permiten competir eficazmente con la de Barcelona y que ésta ha perdido el protagonismo económico que tenía. A estos dos ejemplos de creación de grandes infraestructuras de transporte o comerciales se pueden añadir otros. El aeropuerto es uno de ellos. Maragall resume la situación de Barcelona afirmando que desde 1992 ha habido un parón en todos los grandes proyectos de infraestructuras de todo tipo, desde las económicas a las culturales.

No es de sorprender que Maragall esté alarmado por la orientación del Gobierno autónomo de Madrid. El discurso de su presidente, el conservador Alberto Ruiz Gallardón, es exactamente el mismo de Maragall en su época de alcalde. Europa se estructura a partir de la competencia que entre sí se hacen las grandes áreas metropolitanas. La de Madrid tiene quien la potencie. Lo que se potencia en Cataluña es la administración comarcal.