Rabat se niega otra vez ante Fischler a poner fecha a la negociación pesquera

La negociación pesquera entre la Unión Europea y Marruecos se va a retrasar varios meses y no empezará hasta después de las elecciones generales españolas. El Gobierno marroquí explicó ayer a la Comisión Europea que, antes de negociar, su Parlamento deberá debatir en marzo o abril las líneas directrices de la política pesquera. Según el comisario europeo de Agricultura y Pesca, Franz Fischler, "está claro que hasta que no empiece la discusión en el Parlamento no es posible negociar los detalles del acuerdo".La reunión celebrada ayer entre Fischler y el viceministro marroquí de Exteriores, Taieb Fassifihri, sirvió para alcanzar un compromiso en la cuestión del tomate. Fassifihri se comprometió a respetar en febrero y marzo los contingentes de importación de 90.200 toneladas. El comisario europeo y el representante del Gobierno marroquí discutieron sobre estas dos cuestiones durante tres horas y media. Lo que quedó claro es que el arranque de las negociaciones se retrasa.

"Marruecos está preparando la estrategia de su política pesquera para los próximos años y esta propuesta será discutida relativamente pronto en el Parlamento marroquí", justificó el comisario Fischler. "Entonces, los marroquíes estarán listos para empezar a negociar los detalles de un nuevo acuerdo pesquero", añadió.

El comisario anunció que eso no será antes de finales del mes de marzo o en abril. "El viceministro no me ha dado una fecha clara", admitió, y reconoció también que "es posible" que las negociaciones no empiecen hasta después de las elecciones generales en España.

La reunión con el viceministro de Exteriores de Marruecos fue más productiva respecto al problema del tomate. Rabat se ha comprometido a respetar en los próximos dos meses los contingentes de importación fijados en el acuerdo de Asociación con la UE y la Comisión retirará el sistema de certificados si se cumple ese compromiso. El Ejecutivo comunitario planteará la cuestión ante el comité de gestión para poder cambiar el reglamento adoptado en diciembre, explicó Fischler. El certificado de importación se mantendrá durante el mes de enero. Para febrero, la cantidad fijada es de 29.594 toneladas y para marzo, de 23.656 toneladas.

El contingente anual establecido de mutuo acuerdo por Bruselas y Rabat es de 150.676 toneladas anuales, repartidas entre el 1 octubre y el 31 de marzo. A raíz de la denuncia presentada por el Gobierno español, la Comisión Europea ha constatado que en octubre se superó en un 190% la cuota máxima de 5.000 toneladas fijada para ese mes.

[La Plataforma Hortofrutícola Española advirtió ayer que si no se mantiene el régimen de certificados para importación de tomates procedentes de Marruecos habrá "movilizaciones fuertes" en las zonas de producción. El PSOE de Canarias por su parte aseguró que la supresión de ese sistema supondría "la muerte del tomate canario".]