María Asunción Mateo: "La donación de Alberti y León no fue revocada"

Rafael Alberti murió el 28 de octubre, y un mes y medio después estalló el escándalo con la publicación de su testamento. Su viuda, María Asunción Mateo, asegura que la donación que el poeta y María Teresa León hicieron a El Puerto de Santa María "nunca nadie la revocó" y que todo se encuentra bajo la custodia del Ayuntamiento. "Si alguien espera encontrar tesoros fabulosos en Ora Marítima se va a llevar una decepción".

Aitana Alberti, la única hija del poeta, ha hablado de "expolio". "Creo que no ha leído bien el testamento o quizá no la han orientado bien. En ningún momento Aitana queda desheredada, ni muchísimo menos. Seguramente ella no conoce el valor real de las cosas. No comprendo qué es lo que esperaba recibir de su padre", y añade: "Su padre y su madre donaron todo aquello más valioso que tenían a la ciudad de El Puerto de Santa María y lo conserva el Ayuntamiento. De lo que quedó, aparte de la donación, lo más valioso ya lo tiene ella y lo viene disfrutando desde hace años", afirma María Asunción Mateo."La donación que Rafael y María Teresa hicieron en 1979 nunca nadie la revocó. Donaron entonces todos esos objetos a El Puerto de Santa María", insiste. "Eso que se dice que primero se donó al pueblo de Cádiz y que luego se revocó y se hizo otra donación es una invención. Quien hace tales afirmaciones deberá demostrarlo y no podrá, sencillamente, porque es falso".

Se ha hablado de que legaron 1.700 objetos y valiosas pinturas. ¿Dónde están?: "Todo, y repito, todos los objetos donados están bajo la custodia del Ayuntamiento de El Puerto de Santa María. No está todo expuesto porque no hemos podido acometer aún las obras de ampliación del edificio de la Fundación Rafael Alberti, pero todo lo que no está expuesto está inventariado bajo la custodia del Ayuntamiento y todo está por escrito. Nada de eso lo tengo yo, ni en Ora Marítima, ni en ningún otro sitio. Si alguien espera encontrar tesoros fabuloso en Ora Marítima se va a llevar una decepción".

Mateo (Valencia, 1944) lamenta que Aitana se decepcione con el contenido de la herencia de su padre. "El testamento lo ha firmado su padre, no yo. Quizá esta decepción provenga de haber tenido unas expectativas que no se correspondían con la realidad".

La viuda del poeta ha sido acusada de haber manipulado su obra, en concreto de haber eliminado nombres de La arboleda perdida. "Estas afirmaciones sólo me causan pena e indignación. Es lamentable que se cuestione la obra de Rafael por motivos tan bajos como el que Rafael suprimiera algunos nombres en la revisión de su obra. Se me acusa de haber manipulado sus textos, se dice que yo los corregía, ¿que yo los corregía? ¡Qué estupidez! Rafael es quien escribió desde la primera palabra hasta el punto final. Todo lo que aparece allí, y lo que no aparece, lo decidió Rafael en uso de su libertad creativa. Qué responsabilidad están adquiriendo esos seudoguardianes de la obra de Rafael. Cuando ahora me preguntan por qué Rafael quitó determinados nombres de La arboleda, me veo obligada a responder la verdad: hasta nuestra casa llegaron amigos contando cosas realmente vergonzosas acerca del estado físico de Rafael desde el momento en que se casó conmigo, de su estado mental, incluso diciendo que me había casado por motivos muy diferentes al amor. Y recuerdo que Rafael, ante testigos con nombres y apellidos, dijo una frase más o menos así, muy andaluza: "Estos niñitos no los voy yo a inmortalizar en mi obra. Si quieren y si son capaces, que se inmortalicen ellos".

Defiende Mateo la creación de la sociedad El alba del alhelí, de la que ella tiene el 80% y sus hijos David y Marta el resto. "No es una sociedad cuyo objeto sea la explotación de la obra de Rafael. Es una sociedad que se dedica profesionalmente a la gestión de derechos de quienes se los quieran encomendar. Su primer cliente es Rafael Alberti, pero no fue un asalariado, ni quiso formar parte del accionariado porque, por su ideología, jamás quiso ser empresario. Repito, no quiso ser empresario ni para sí mismo, y es algo que no puedo por menos que respetar. Desde hace años vengo llevando adelante la gestión de sus derechos y mis hijos me han ayudado en lo que ha sido necesario".