Los familiares de Elián en Miami aseguran que Castro presiona al padre
Lázaro González es el tío abuelo del niño de seis años Elián González y, según explica, el servicio de inmigración de EEUU le ha concedido la custodia temporal del menor mientras se resuelva su situación legal (por el momento Elián tiene un permiso de estancia en ese país de un año y un día). Desde su domicilio del barrio Pequeña Habana de Miami, Lázaro, de 41 años y uno de los seis hermanos del abuelo paterno de Elián que viven en Miami, dice estar dispuesto a evitar la repatriación del menor a Cuba y así se lo ha hecho saber a su padre, Juan Miguel González Quintana, de 31 años y residente en Cuba. Según ha declarado Lázaro González al diario El Miami Herald, "es indiscutible que [en Cuba] lo están presionando y chantajeando con el empleo que tiene en Varadero, pues con anterioridad él se había manifestado a favor de venir a los Estados Unidos".Ayer, el tío abuelo se negaba a conceder una entrevista a este periódico y no permitía ver al niño, fotografiado en múltiples ocasiones por la prensa, porque "lo desaconsejan los sicólogos y los abogados". Lo que sí confirmó Lázaro es que habla casi a diario con Juan González desde que Elián fue rescatado de las aguas del Caribe, donde naufragó la balsa en la que salió de Cuba y donde murieron su madre, su padrastro y otras nueve personas. "Hablamos desde el hospital con él [con Juan González] pues los médicos quisieron saber si el niño es alérgico a algún medicamento. Le dije entonces que el niño se había salvado de milagro y que cualquier conversación sobre reclamarlo era prematura en esos momentos", asegura Lázaro González, que llegó hace "veintitantos años" a Florida.
En el Barnes Park, los tíos abuelos de Miami reunieron el domingo a más de medio centenar de personas y a multitud de primos llegados en los últimos seis meses y con los que tenía amistad Elián y, frente a una tarta gigante, le cantaron en inglés Happy Birthday. Horas antes, desde el pueblo de Cárdenas, en Cuba, su padre, José Miguel González, y sus cuatro abuelos le cantaron por teléfono el Feliz Cumpleaños en español. Elián, confuso, le pidió a su padre que le cuidaran su pupitre en el colegio hasta que volviera, pero le dijo que quería quedarse en Miami.
El día antes, Spencer Eig, el abogado que representará a los familiares de Elián en Miami aseguraba que prefiere resolver el asunto "fuera de los tribunales" y evitar sufrimientos al niño. "Él [Juan González] ha asumido un tono agresivo y es obvio que está sufriendo presiones del régimen cubano", insistía el abogado a El Miami Herald.
El proceso judicial puede retrasarse meses, incluso años, por la complejidad legal del caso en sí y por las posibles apelaciones. Bajo los acuerdos migratorios vigentes, los cubanos que pisen tierra norteamericana pueden solicitar asilo político mientras que los que son recogidos en el mar son deportables. Pero las circunstancias en las que Elián llegó a EEUU no están definidas en la Ley de Ajuste Cubano, por lo que se prestan a interpretación.
Al niño lo recogió un pescador norteamericano que se negó a entregarlo a las autoridades del servicio de guardacostas por temor a su salud y a que lo deportaran. Los agentes accedieron, lo llevaron a tierra y días después el Departamento de Inmigración (INS) le ha otorgado permiso de estancia hasta que se revise su caso el próximo 23 de diciembre.
Por su parte, el exilio anticastrista de Miami ha enarbolado la bandera de Elián como instrumento contra el régimen de la isla. El niño apareció en las primeras imágenes vistiendo una camiseta de la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA), conocida por su lucha anticastrista. Al igual que la organización Hermanos al Rescate, cuyo presidente, José Basurto, inmortalizó en vídeo la fiesta de cumpleaños de Miami.
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