El plazo del 2002 para el protocolo de Kioto gana apoyos en Bonn

El plazo del año 2002 como objetivo para que entre en vigor el Protocolo de Kioto -documento internacional aprobado en 1997 que establece las reducciones de gases de efecto invernadero que están calentando la Tierra- gana apoyo en la cumbre del clima que se celebra en Bonn.De la propuesta del canciller alemán al inaugurar el pasado día 25 esta Conferencia de las Partes del Convenio Marco de Naciones Unidas para el Cambio Climático, se van haciendo eco muchos participantes en la reunión, que ha convocado a delegados de 173 países, con unos 4.000 delegados entre representantes gubernamentales, observadores y organizaciones no gubernamentales. Incluso empiezan a circular por la sede de la conferencia esquemas que describen la posibilidad de que el protocolo sea ratificado -y por tanto se haga operativo- aún a espaldas de EEUU, a quien todos miran como clave de este paso decisivo.

"El 2002 es un objetivo que está en el ambiente, una motivación que mañana saldrá en los discursos de varios países", comentó ayer el secretario ejecutivo del Convenio, Michael Zamit Cutajar.

El Protocolo de Kioto, que fija una reducción en un 5,2% de los gases de efecto invernadero que los países desarrollados emiten a la atmósfera -para el plazo 2008-2012 respecto a los niveles de 1990-, sólo entrará en vigor cuando lo hayan ratificado 55 países que sumen el 55% de las emisiones del mundo industrializado, lo que está muy lejos del actual panorama de ratificación.

Bill Hare, representante de Greenpeace, calcula que si la UE, Rusia, Suiza y los países del centro y este de Europa firman y ratifican el protocolo, luego habría que encontrar algún socio más como Japón, o Ucrania, o tal vez Argentina o Australia, para lograr ese 55%

Rusia y EEUU

Lo difícil en este escenario es romper la fuerte alianza de Rusia y EEUU en las negociaciones del clima, ya que ambos están interesados en poner en marcha -sin limitaciones- la compraventa de emisiones de gases (EEUU para comprar y Rusia para vender sus excedentes), posibilidad contemplada en el Protocolo de Kioto y cuyas especificaciones acaparan gran parte de esta conferencia. El Senado de EE UU ha anunciado que no ratificará el protocolo mientras no se introduzcan los mecanismos que desea. Además de la compraventa de emisiones, otros mecanismos son los proyectos conjuntos entre varios países y la transferencia de tecnologías al mundo en desarrollo, como vías para facilitar el cumplimiento de las reducciones de emisiones obligatorias para los países ricos."Los puntos esenciales que están en el tapete son estos mecanismos, las medidas que se puedan adoptar por el incumplimiento del protocolo por parte de un país, y la trasferencia de tecnologías y ayudas a los países en desarrollo vulnerables a los impactos del cambio climático", explicaba ayer Luis Mas, miembro de la delegación española.