_
_
_
_
_

La producción de vino descenderá a 32 millones de hectolitros este año

El sector vitivinícola español baraja datos poco alentadores para la campaña de este año: sólo se espera producir 32 millones de hectolitros, cinco millones menos que el año pasado. Al mismo tiempo, la zona de La Rioja tendrá una cosecha de uva escasa, frente a una abundante en la de Ribera del Duero. En esta última zona se ha desatado un guerra de precios entre los bodegueros.

La producción de vino en la presente campaña ascenderá a solamente unos 32 millones de hectolitros, según los datos manejados por el sector. Esta cifra se halla muy por debajo de la media de producción en España, de unos 37 millones de hectolitros, y está dando ya lugar a una vendimia con buenos precios para la uva en todas las zonas, aunque no exenta de polémicas. La cosecha a la baja en La Rioja está provocando altas cotizaciones, mientras en la parte contraria -una producción récord en Ribera del Duero- está provocando una guerra de precios entre los viticultores, que quieren cotizaciones similares a las del año pasado, y las bodegas sin viñedos que han tratado de suscribir pactos para comprar uva barata para no perder competitividad frente a sus rivales de otras zonas de denominación de origen.

Poca uva, pero buena

Las previsiones de una gran cosecha de uva se quebraron el pasado verano ante la fuerte escasez de lluvias. Las aguas del mes de septiembre han llegado tarde en la casi totalidad de las zonas y no van a suponer un aumento en el volumen de la producción, razón por la cual se han bajado las previsiones de producción de 34 millones de hectolitros a solamente los anteriormente mencionados 32 millones de hectolitros, que suponen la última previsión del sector. No obstante, en medios agrarios se considera que se trata de una campaña con uva de buena calidad.En Castilla-La Mancha se espera una producción de unos 18,5 millones de hectolitros, frente a unas previsiones iniciales de 20 millones de hectolitros. Las heladas y el pedrisco han marcado esta campaña las cosecha en zonas como La Rioja, Utiel-Requena o Rueda, mientras en la Ribera del Duero se espera este año una cosecha excepcional en cantidad y buena en calidad, con unos 60 millones de kilos.

Apenas iniciada la recolección, se están manejando unos buenos precios para el agricultor en todas las zonas, aunque hay unas grandes diferencias según denominaciones de origen y tipos de materia prima.

En Castilla La Mancha, los precios de la uva que se manejan van desde las 35 pesetas por kilo para la blanca, hasta las 130 pesetas para las variedades de uva tinta de mayor calidad, como la cencibel, y de unas 65 a 70 pesetas el kilo para otros tipos de uva tinta.

La Rioja y Ribera del Duero siguen marcando los precios más altos para la uva. En el caso de La Rioja se está pagando la uva a una media en torno a las 400 pesetas por kilo, un precio más alto que en las campañas precedentes, consecuencia de la reducción de cosecha provocada por las heladas durante los meses pasados.

En Ribera del Duero hace un año se batieron las marcas nacionales de precios por la uva, al cotizarse la misma en torno a las 400 pesetas por kilo. Este año se espera una gran cosecha, hasta el punto de que el Consejo Regulador autorizó producciones máximas por hectárea de hasta 7.700 kilos, frente a los 7.000 kilos que se suelen aplicar en una campaña estándar.

A pesar de la existencia de una cosecha elevada, los viticultores y, fundamentalmente las bodegas más enraizadas en la zona que apuestan por la calidad, defienden la existencia de unos precios altos, en torno a las 350 pesetas por kilo. En opinión de estos bodegueros, se trata de una buena materia prima y no tendría sentido bajar los precios cuando con las producciones de esta campaña tampoco se llega a cubrir la demanda actual del mercado a las cotizaciones actuales. Los viticultores y cooperativas controlan más del 80% de la oferta de uva.

Guerra de bodegueros

En la parte contraria se hallan las bodegas recién afincadas en la zona, sin viñedos propios, que en las últimas semanas han intentado un pacto para no pagar la uva por encima de las 200 pesetas por kilo.Los agricultores rechazaron las declaraciones recientes del ex presidente del Consejo Regulador José Balbás, señalando la posibilidad de bajar los precios de la uva ante la existencia de una buena cosecha. Los viticultores se negaron a vender a esos precios y el presidente del Consejo no tuvo más remedio que presentar su dimisión.

Para los responsables de Pérez Pascuas, una de las bodegas pioneras implantadas en la zona, no sería bueno para el sector subir los precios de la uva, pero tampoco bajar los mismos cuando se ha hecho un gran esfuerzo en los años precedentes para conseguir una posición destacada para estos vinos en el segmento alto de calidad y cuando hay demanda suficiente en ese mismo mercado de precios altos.

"Hay que impedir", señala Manuel Pérez Pascuas, que nadie venga a la zona a tirar abajo los precios de la uva y a vender vino barato con el consiguiente deterioro de la calidad. (...) Sería el fin de esta denominación de origen ".

En el conjunto de las zonas de producción vitivinícola, la tendencia actual en el mercado es que cada día la uva tiene mejor precio y que cada día hay mayores producciones de mejor calidad.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_