La Legión pide refuerzos contra los francotiradores

Una patrulla de la Legión que protegía el monasterio ortodoxo de San Nicolás, en las proximidades de Istok, pidió refuerzos la noche del domingo al sentirse hostigada por francotiradores. Es el primer incidente en el que se ven envueltas las tropas españolas, que se desplegaron al noroeste de Kosovo la semana pasada. El comandante Juan Martín Cabrero restó importancia al hecho, señalando que los legionarios sintieron una ráfaga próxima, pero no está demostrado que disparasen contra ellos. El pelotón, formado por dos blindados medios sobre ruedas, fue apoyado por otra unidad similar que se desplazó a la zona, sin que se repitieran los disparos ni los españoles tuvieran que repelerlos. "Afortunadamente no hemos disparado ni un cartucho hasta ahora", agregó el comandante. Los legionarios tomaron ayer el centro de Istok, para garantizar la seguridad del ex vicepresidente de EEUU, Bob Dole, de visita en la zona, y durante las dos horas que estuvieron allí, dos casas fueron incendiadas y se halló el cuerpo de un serbio muerto hace días.