Acuerdo del Banco Mundial y la UICN para la naturaleza

El presidente del Banco Mundial, James Wolfensohn, y la directora general de la UICN, Maritta von Beiberstein Koch-Weser, firmaron la pasada semana en Washington un acuerdo para colaborar en una mejor gestión de los recursos naturales en los países en vías de desarrollo, donde el banco financia proyectos de gran envergadura. El acuerdo se ha plasmado en un memorándum en el que se refuerzan las relaciones de ambas instituciones para dar paso a una nueva estrategia de colaboración, según la agencia medioambiental ENS. La Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza (UICN) es una de las organizaciones conservacionistas más prestigiosas y veteranas del mundo. Fue creada en 1948, y en la actualidad agrupa a gobiernos, agencias gubernamentales y ONG que trabajan junto a científicos y expertos.

"Para que el desarrollo no suponga pérdida del capital natural y sea sostenible, necesitamos estrechar nuestras relaciones y ayudar a nuestros clientes de países en desarrollo, dándoles la oportunidad de gestionar sus recursos naturales de una manera sensata", ha declarado el asesor de medio ambiente del Banco Mundial, Kenneth Newcombe.

La formalización de los vínculos entre el Banco Mundial y la UICN se ha consumado tras haber explorado distintas vías de cooperación en un proyecto piloto que ha durado cuatro años. A partir de ahora se concentrarán en crear y fortalecer instituciones nacionales que velen por el medio ambiente y desarrollen políticas y legislación ambiental. Asimismo, se intercambiarán personal y expertos de ambas organizaciones.

Comisión de presas

Durante los últimos cuatro años uno de los campos decisivos en los que han colaborado las dos instituciones ha sido la creación de la Comisión Mundial de Presas, en la que se han invertido más de 7,5 millones de dólares (1.200 millones de pesetas). Esta comisión se ha encargado de concluir un informe para el año 2001 en el que se harán recomendaciones sobre la viabilidad de grandes presas, dónde, cuándo y cómo construirlas si no hay ninguna otra alternativa. La comisión ha comenzado a estudiar los impactos sociales y económicos de diez de las mayores presas del mundo cuya construcción supone el desplazamiento de millones de afectados, como la de las Tres Gargantas en China o la de Tarbela en Pakistán.

La UICN intervendrá como asesora en el desarrollo de la política Estratégica del Banco Mundial en el ámbito forestal mediante un programa plurianual que ayude a mantener las reservas forestales mundiales.