Carlos Fuentes y Jesús de Polanco ingresan en el Caro y Cuervo

El filósofo colombiano Danilo Cruz, el escritor mexicano Carlos Fuentes y el presidente del Grupo Santillana, Jesús de Polanco, ingresaron ayer como miembros de honor en el prestigioso instituto colombiano Caro y Cuervo. El acto solemne y emotivo en la hacienda Yerbabuena, sede de la institución a 30 kilómetros de Bogotá, se convirtió en un acto de exaltación del idioma español. Se habló mucho de paz, futuro y cultura.

Asistió el mundo académico, escritores, editores, ex presidentes, ministros y ex ministros. El premio Nobel colombiano Gabriel García Márquez estuvo en la mesa aunque no habló. Quiso acompañar a sus amigos en un encuentro que todos consideraron trascendental. Presidió y cerró el acto el presidente de Colombia, Andrés Pastrana. "En realidad, Danilo Cruz, Carlos Fuentes y Jesús de Polanco pertenecen al Caro y Cuervo desde todos los tiempos por la labor que realizan en favor de la cultura y del idioma en sus diversas áreas", afirmó el presidente del Instituto, Ignacio Chaves.

La paz y el futuro estuvo en boca de todos. "En el Día de la Lengua queremos decir al pensamiento de Colombia que en Yerbabuena está el camino de la esperanza", dijo Chaves. "Queremos construir el mañana que nos han negado".

"Frente a los duros avatares históricos que ha vivido Colombia en las últimas décadas, aquí está esta extraordinaria institución, para asombro y maravilla de tantos", dijo Jesús de Polanco al agradecer su ingreso.

Carlos Fuentes reivindicó en su discurso la función de la narrativa como vehículo de civilización. "La novela llena un vacío que responde a clamores de civilizaciones enteras. La literatura es la identidad que adquiere la palabra y la palabra es nuestra primera identidad. Estamos en un territorio común en el que los que escribimos podemos reunirnos. Es un inmenso honor estar en el centro de la cultura de Colombia", dijo.

Danilo Cruz explicó la fascinación que sintió siempre por el Instituto y habló del trabajo que realizaron aquí lingüistas como Rufino José Cuervo o Miguel Antonio Caro.

Chaves trazó un riguroso perfil de los tres nuevos miembros. "Cruz ha sido pionero en el pensamiento crítico hispanoamericano. En los años cuarenta nos hizo conocer a filósofos como Kant o Hegel. Ha desempeñado en Colombia el papel que tuvieron en España filósofos como Miguel de Unamuno o José Ortega y Gasset".

Para De Polanco tuvo palabras encendidas: "Permítame decir que usted es uno de aquellos seres que honran la condición de ser humanos; usted ha llegado a convertir la solidaridad en un lenguaje comprensible para todos en un mundo en el que cada vez más se exige colocar en la mano extendida del prójimo, no sólo la dádiva generosa, sino el aporte inteligente de quien ofrece posibilidades y alternativas. Me complace siempre pensar en que la solidaridad es esa única virtud en que uno se enriquece dando".

"Yo puede decirle que usted habla el lenguaje del porvenir; ese lenguaje que se convierte en gesto de humanidad y que abre caminos para un futuro mejor", concluyó. Habló después del trabajo del presidente de Santillana en la construcción del diario EL PAÍS, de la creación del grupo como difusor de la cultura y la lengua y de los diez años que se celebran estos días de la Fundación Santillana para Iberoamérica, que dirige el ex presidente colombiano Belisario Betancur.

"La lengua, nuestra hermosa lengua común castellana, española, cobra una muchísima mayor importancia universal como vehículo de cultura y de inspiración para el diálogo cultural y, por ende, para la convivencia, la cooperación, el desarrollo, la solidaridad y la paz", dijo De Polanco.

"Con Fuentes", afirmó Chaves, "celebramos el rito de la felicidad lingüística". El escritor repasó su obra, "que desvela el laberinto por el que deambula el alma de la cultura mexicana y en la que se construye la suerte de escuchar la expresiva polifonía de un territorio multicultural".