Engaño deliberado al Congreso
Cuando el Congreso de Estados Unidos estaba considerando en febrero de 1984 votar nuevos proyectos de asistencia de seguridad a Guatemala, el Gobierno del entonces presidente, Ronald Reagan, afirmó en un informe al Congreso que "el Gobierno de Guatemala ha dado pasos para reducir" los abusos en el campo de los derechos humanos, a pesar de tener información de que "los escuadrones de la muerte" se habían reactivado en el país apenas cuatro meses antes.En 1983, tres guatemaltecos que trabajaban para la Agencia de Desarrollo Internacional de EEUU (AID) desaparecieron. El embajador norteamericano en Guatemala afirmó en un cable dirigido a Washington: "Mi propia opinión es que el incidente fue una represalia inmediata". El 2 de febrero, Chapin escribió otro memorándum a Washington en el cual describe su creciente preocupación sobre "los escuadrones de la muerte". Tras mencionar los tres desaparecidos de la AID, Chapin apuntó: "Estos nuevos e impactantes casos indican que el Gobierno de Guatemala va a atacar siempre que encuentre un blanco importante".
La carta del funcionario estadounidense agrega: "Vuelvo a subrayar, como hice el otro día en San Salvador, el conflicto que se daría de incorporar a Guatemala al plan de Estados Unidos para todo el hemisferio frente a las realidades horribles que muestra la situación de los derechos humanos en Guatemala".
"O bien podemos ignorar estas pruebas y recalcar el concepto estratégico o bien tenemos que tomar un sendero de moralidad. No podemos seguir cambiando nuestra postura", añade.
Un día después, el Departamento de Estado norteamericano entregó el informe al Congreso que elogió los esfuerzos de Guatemala para reducir los abusos de derechos humanos.
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