Asaja contradice a la Junta y estima que la cosecha de aceite no superará el cupo

Asaja no está de acuerdo con las cifras sobre el aceite de oliva que ha hecho públicas la Junta de Andalucía, con una producción en Jaén cercana a las 400.000 toneladas en la actual campaña. "Este año España difícilmente va a llegar a las 750.000 toneladas", ha sentenciado Luis Carlos Valero, gerente de Asaja-Jaén. Por su parte, el consejero de Agricultura, Paulino Plata, dijo ayer en Málaga que los datos definitivos de la cosecha se sabrán la semana que viene. La Consejería cree que las penalizaciones llegarán al 17%.

Si se confirmaran los datos de Asaja, España no tendría penalizaciones en las ayudas, ya que el cupo establecido en la OCM del aceite se sitúa en 760.000 toneladas, cantidad en la que también entra la aceituna de mesa. "Lo que está claro es que de un millón de toneladas ni hablar. Ha habido una falta de rigor que ha supuesto pérdidas millonarias para el sector", añadió. La batalla de cifras abierta entre las administraciones central y autonómica volvió a reproducirse ayer. Asaja considera más acertada la información de la Agencia del Aceite de Oliva, dependiente del Ministerio de Agricultura, que el 31 de enero cifraba la producción en 585.000 toneladas, a falta de completar la campaña en Córdoba y Jaén. Hasta ahora los datos de Jaén han sido referente para conocer la producción nacional de aceite, ya que en esta provincia se calcula que se produce el 40 por ciento del total. Asaja cuadra sus cálculos cambiando el porcentaje: este año cree que representa el 50 por ciento del total. La propia Junta sitúa la producción jiennense en 365.000 toneladas, sin los añadidos de última hora. Asaja se enfrentó ayer con dureza con la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), por seguir las tesis de la Junta. Eso llevó, según Valero, a que muchos olivareros vendiesen aceite a bajo precio cuando la Administración andaluza avanzó previsiones de una gran campaña y auguró una caída en el valor del aceite. El resultado "ha sido de pérdidas millonarias por las que alguien tendrá que responder". Como primer paso, Valero cree que se tendría que "correr a gorrazos" a los miembros de UPA por haberse metido en la batalla de cifras en la que se enfrentaban los dos gobiernos. El consejero de Agricultura, Paulino Plata, no quiso entrar ayer al trapo de la polémica y prefirió esperar a la semana próxima, cuando se conocerá la producción regional: "Hacer extrapolaciones es especular y no quiero. No deseo alimentar la polémica, si Asaja quiere hacerlo, allá ellos. Nosotros hemos dado datos de cierre, de aceite que está almacenado en las almazaras. La semana que viene daremos el cierre definitivo de la cosecha de aceite de oliva en Andalucía. ¿Cuál va a ser el nivel? Ahora no lo sé porque faltan datos de Córdoba, Málaga y Granada. Tenemos el de Jaén que son 411.000 toneladas sumando aceite de oliva más aceite de orujo". El consejero sostuvo que hacer extraprolaciones podría inducir a error porque la climatología el año pasado fue muy atípica y no hubo cosechas homogéneas, incluso dentro de una misma comarca. Producción Fuentes de la Consejería de Agricultura calculan que la producción podría rondar las 900.000 toneladas. Alcanzar esa cifra supondría penalizaciones de entre un 17 ó un 18%, ya que el cupo asignado a España es de 760.000 toneladas según la OCM aprobada el pasado verano. El consejero hizo también una valoración del impacto que tendrán los recortes de los fondos agrarios que prevé aplicar la Unión Europea. El olivar andaluz perdería casi 20.000 millones de pesetas de ayudas. La cifra supone que el sector asumirá en torno al 66% de la reducción de las subvenciones. Paulino Plata pidió al Gobierno "que se preocupe" por los cultivos mediterráneos y los defienda en el debate de la Política Agraria Común (PAC) que tiene lugar en Bruselas. La Junta de Andalucía calcula que si prospera la fórmula francesa, habrá un recorte del 12% en las ayudas. "No podemos aceptar que las OCM continentales (vacuno, lácteos y herbáceos) tengan mejoras importantes y que las mediterráneas (aceite de oliva, tabaco y frutas y hortalizas) sufran un nuevo revés", protestó Plata. La Consejería sustenta su demanda en que en los últimos años los cultivos continentales se beneficiaron de un incremento de las ayudas, mientras que los del sur ya sufrieron recortes en reformas anteriores. Plata también reclamó a la ministra, Loyola de Palacio, que defienda la agricultura familiar. Las pequeñas y medianas explotaciones generan el 80% del empleo agrario y representan el 66% de las empresas del sector. Para la Consejería, en la reforma de la PAC el campo andaluz se juega, además de 30.000 millones de pesetas en ayudas, el futuro de las comarcas rurales. "La agricultura es la actividad económica que mantiene vivos nuestros pueblos. Una mala reforma puede poner en riesgo su supervivencia y generar desequilibrios demográficos. Y eso generaría problemas sociales que pueden costar mucho más que el mantenimiento de una política agraria razonable", advirtió Plata.