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Entrevista:

"Habrá una carrera entre los telescopios Keck y VLT para hacer interferometría"

La astrónoma francesa Catherine Cesarsky, de 56 años, será a partir de septiembre directora general del Observatorio Austral Europeo (ESO, siglas en inglés), el organismo internacional propietario de los telescopios VLT, de La Silla (Chile) -cuatro gigantes que acabarán de instalarse en el 2001 y de los que el primero está a punto de inaugurarse oficialmente-. Tras estudiar en la Universidad de Buenos Aires, Cesarsky se doctoró en la Universidad de Harvard y trabajó en el Instituto Tecnológico de California (ambos en EEUU). Desde 1994 dirige el área de Ciencias de Materiales del Comisariado de Energía Atómica (CEA) francés, que engloba a unos 3.000 investigadores. También ha sido responsable de la cámara infrarroja del telescopio espacial europeo ISO.Pregunta. ¿Cree que España debería pertenecer a ESO?

Respuesta. Aún no puedo hacer declaraciones sobre ese tema.

P. Pero hace un tiempo se planteó la posibilidad de que ESO fuera socio del Gran Telescopio de Canarias, con un espejo de 10 metros de diámetro, a cambio de que España entrara en ESO. ¿Es eso posible aún?

R. Es demasiado pronto para hablar de esto. Mi puesto actual ocupa todo mi tiempo.

P. Usted ha trabajado en América del Sur, EE UU y Europa. ¿Es la investigación muy distinta en los tres continentes?

R. Ya no tengo una visión actual de la investigación en Argentina. En Chile sí ha habido avances importantes en los últimos años, y, desde luego, también en Europa, gracias sobre todo al VLT y a ISO. Desde este punto de vista me considero muy afortunada de trabajar en ambos proyectos. Además, ahora vuelvo a estar relacionada con Suramérica, y eso es un gran aliciente para mí. Aunque tendré que dejar Francia y vivir con un pie en Múnich y otro en Chile.

P. No hay muchas mujeres científicas en altos cargos.

R. ¡Uy!, en Estados Unidos todos los actuales directores de institutos estudiaron conmigo. En Europa ahora empieza a haber más mujeres en puestos altos, pero la verdad es que estoy tan acostumbrada a ser la única que ya ni me doy cuenta.

P. ¿Qué piensa hacer con la herencia que le deja el actual director de ESO, Riccardo Giacconi?

R. Él y todo su equipo me entregan una herencia... ¡enorme!, una excelente situación. Tengo una suerte única. El primero de los VLT funciona muy bien, el segundo verá su primera luz en marzo y luego iremos uno por año. Cuando esté acabado, el VLT será el mayor conjunto instrumental del mundo. Yo no tengo aún planes, pero, desde luego, no llegaré con la idea de cambiarlo todo.

P. ¿Cuándo estarán listos los cuatro VLT para hacer interferometría ?

R. Eso vendrá más tarde. Aún hay algunos problemas tecnológicos que resolver.

P. ¿Lo lograrán antes los telescopios Keck, de Hawai?

R. Sin duda va a haber una cierta carrera entre los Keck y el VLT. Pero el VLT está pensado específicamente para hacer interferometría, y los Keck, no.

P. ¿Qué van a aportar a la astronomía los nuevos telescopios gigantes? R. La astronomía ya está cambiando radicalmente gracias a ellos. Estamos redescubriendo el universo. Habrá avances en la búsqueda de planetas extrasolares, en el conocimiento de las reacciones químicas en el medio interestelar, de la evolución de las galaxias... Y será una labor combinada de muchos instrumentos.

P. ¿Qué campo de la astrofísica le interesa más?

R. He trabajado en muchos campos. Empecé en el área de altas energías, estudiando, por ejemplo, la propagación y la composición de los rayos cósmicos galácticos. Luego me interesé por el medio interestelar y mi actividad última es en astronomía infrarroja, con ISO. Lo que más me interesa ahora es la evolución de las galaxias.

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