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Siete cadenas, dos de ellas españolas, optan al hotel de lujo de Abandoibarra

Tres cadenas hoteleras estadounidenses, dos españolas, una francesa y otra británica optan a la construcción de un hotel de lujo en el área de Abandoibarra, cuyas obras no comenzarán antes del próximo verano. La sociedad Bilbao Ría 2000 ha impuesto una lista de 15 arquitectos de prestigio, entre los que los promotores del hotel deberán elegir para el proyecto constructivo. Además, se descarta la idea de un parque temático medioambiental en Barakaldo y se opta por uno de ocio.

El último Consejo de Administración del año de Bilbao Ría 2000, el organismo que agrupa a todas las instituciones para la revitalización del área metropolitana, estuvo plagado de asuntos: desde las ofertas para el hotel y diversas obras en el proyecto Urban-Galindo -el plan de regeneración urbanística de los antiguos terrenos de Altos Hornos de Vizcaya en Barakaldo- hasta el presupuesto y las actuaciones previstas para 1999. Como era previsible, el concurso abierto para el hotel de lujo en Abandoibarra ha suscitado el interés de las principales cadenas hoteleras del mundo. Bilbao Ría 2000 ha aceptado las propuestas de todas las presentadas en el plazo que expiró el lunes -hubo una octava de una cadena japonesa que llegó fuera de hora-: las estadounidenses Hyatt, Marriott y Sheraton; las españolas Sol Meliá y Tryp; la británica Inter-Continental y la francesa Accor. La única novedad aprobada es que ahora la empresa promotora deberá elegir un arquitecto entre una lista de 15 elaborada por Bilbao Ría 2000, entre los que se encuentran Norman Foster, Frank O. Ghery y César Pelli y, como españoles, Rafael Moneo y Ricardo Bofill. Muchos de ellos ya figuran en las propuestas presentadas por las cadenas. Máxima categoría El alcalde de Bilbao y presidente de Bilbao Ría 2000, Josu Ortuondo, relató que las ofertas coinciden en ofrecer un hotel de la máxima categoría, cinco estrellas, y con un diseño singular en una superficie de 1.644 metros cuadrados y con diez plantas de altura. Ortuondo añadió que varios grupos han mostrado su interés en asentarse en otras zonas de Bilbao. A partir de ahora, los promotores del hotel -dos familias bilbaínas que se hicieron con el solar a cambio de los terrenos que tenían en la zona del Museo Guggenheim- deberán elegir la cadena hotelera y el arquitecto del proyecto de construcción. "Nosotros daremos el visto bueno y a partir de entonces el proceso dependerá de ellos, que deberán pedir las licencias de obras y actividad al Ayuntamiento". Los cálculos de Bilbao Ría 2000 sitúan en febrero la presentación del boceto inicial del hotel. Luego se deberá elaborar el proyecto constructivo, que se puede prolongar "cuatro, cinco o seis meses", con lo que el inicio de las obras no será antes de junio. No será ésta la única actuación en Abandoibarra, que tras cuatro años enfrascada en proyectos empezará a tomar cuerpo en 1999. Ortuondo señaló que la sociedad se ha comprometido a acometer el boulevard que discurrirá junto a a la ría y el parque de la Ribera hasta la futura pasarela de la Universidad de Deusto, así como la venta de dos parcelas de bloques de viviendas. El Consejo de Administración dio luz verde al director general, Pablo Otaola, para que explore las propuestas para ejecutar un parque de ocio dentro del proyecto Urban-Galindo, desestimando el parque educativo medioambiental que había barajado hasta ahora Bilbao Ría 2000. "No teníamos financiación para los 11.000 millones de inversión y además ha habido interés de empresas para hacer un parque de ocio", justificó Ortuondo. Empresas como Futuroscope y Aquapark habían mostrado su interés en esta infraestructura, que ocuparía 63.000 metros cuadrados y podría contar con una asistencia anual entre 500.000 y 750.000 visitantes. "La idea es que tenga carácter regional", dijo.

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