El 80% del dinero para formación del profesorado se va en gastos de imprenta, según el ministerio

Sólo dos de cada diez pesetas que el Ministerio de Educación dedica a formación del profesorado se destinan a creación intelectual. Los gastos de impresión, almacenamiento y distribución de material se llevan -o se llevaban hasta que la generalización de los sistemas digitales permite ir sustituyéndolo por un CD-ROM- las ocho pesetas restantes, según señaló el director del Programa de Nuevas Tecnologías del ministerio, Jaime Denis, en unas jornadas sobre Nuevas Tecnologías al Servicio de la Educación organizadas por la Fundación Barrié de la Maza en A Coruña.

Denis señaló también que dos tercios del coste de instalación de un punto de red digital son de mano de obra. Para reducirlo, desde hace año y medio está en marcha el programa Échanos un cable: formar a alumnos, padres, profesores y voluntarios en técnicas de instalación y facilitarles el material. "Los resultados han sido espectaculares, no sólo porque nos ha salido a un tercio de los precios de mercado", dijo, "sino también porque hay más interés en usar y en cuidar lo que se ha creado personalmente".

Pero la economía no es la única ventaja de los sistemas de comunicación digital en la educación. "Una red informática permite nuevos usos del profesorado, impartir materias determinadas, como alemán, a alumnos de centros con poca demanda, o evitar desplazamientos para cursar otras", señaló Ferrán Ruiz, responsable de Xarxa Telemática Educativa, la apuesta del departamento de Enseñanza de la Generalitat catalana.

De los 45.000 profesores de primaria y secundaria de Cataluña, 20.000 están conectados a Internet, y el programa Argo, presentado hace un mes, prevé que en este mismo año académico haya un máximo de 300.000 cuentas de correo electrónico para alumnos de secundaria, de uso personal, durante todo el curso, siempre a petición del centro y bajo control del profesorado.

35.000 profesores

La implantación de las nuevas tecnologías no es uniforme. En el territorio MEC (las comunidades sin competencias educativas) están conectados 35.000 profesores (hace dos años eran 900). Paradójicamente, en Galicia, quizá la comunidad con mayor desarrollo de las RDSI (redes de banda ancha), se ha firmado hace un mes el convenio para conectar paulatinamente a Internet a los centros de secundaria, según José Luis Freire, catedrático de Computación de la Universidad de A Coruña y responsable del proyecto del Ayuntamiento de la ciudad de dotar de Internet a todos los centros públicos (10 o 15 puestos en cada uno) en el plazo de tres años.Cuestiones subyacentes a esta carrera digital en la que, empujadas por la demanda social, están inmersas las administraciones educativas son el cómo y el para qué. "Los proyectos faraónicos de miles de millones como el anunciado por Esperanza Aguirre pueden ser estériles. Ya hay muchas aulas llenas de ordenadores polvorientos. La formación en este campo vendrá de abajo o no vendrá", señaló al inicio de las jornadas José Antonio Millán, editor digital y filólogo.