Sobre "Los hijos de Yoyes"

Quisiera denunciar el reportaje titulado Los hijos de Yoyes . Además de constituir una grave falta de respeto a Juanjo y Akaitz Dorronsoro, el reportaje es una colección de manipulaciones yPasa a la página siguiente

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mentiras acerca del Liceo Santo Tomás y las ikastolas.

Me eduqué en ese centro durante 15 años, y sus profesores me enseñaron a valorar la pluralidad de la sociedad vasca, me formaron en el respeto a los demás y a la dignidad humana, y me inculcaron que los derechos de un pueblo nunca pueden imponerse a los derechos de las personas. Sin embargo, la firmante prefiere vernos como pequeñas bestias incendiarias de Jarrai, adoctrinadas a golpe de Sabino Arana, y ni siquiera menciona el extenso proyecto educativo de la ikastola Santo Tomás Lizeoa.

Como antiguo alumno, aún estoy asombrado por el tremendo infierno nacionalista que vio la periodista en mi ikastola. Como periodista, me ha sorprendido el poder distorsionador que puede tener nuestra profesión. La periodista acudió al Liceo Santo Tomás sabiendo de antemano qué reportaje quería escribir. Buscaba un puñado de chavales que quemaran autobuses para mostrar al mundo que las ikastolas son la cantera de la violencia, así que no le interesábamos los miles de antiguos alumnos que nos repartimos por todos los sectores e ideologías de la sociedad.

Por lo visto, la normalidad no es tan espectacular; unas gotas de realidad podían aguar el estremecedor reportaje publicado, casualidades de la vida, una semana antes de las elecciones vascas.

Además de un antiguo alumno enfadado, soy un periodista triste, porque con semejantes desprecios a la ética, la credibilidad de nuestro trabajo queda a la altura del Titanic.-