Los libreros de Vizcaya aseguran que el 90% de los colegios se salta la ley sobre la venta de libros
El Consejo Empresarial de Comercio de Vizcaya (Cecovi) reveló ayer en Bilbao que sólo un 10% de la venta de libros y material didácticos se hace de manera legal. El presidente de Cecovi, Pedro Campo, añadió que el negocio de los libros escolares mueve cifras que oscilan entre los 1.600 y los 2.000 millones de pesetas al año. Las asociaciones de padres y los proveedores de los colegios son los principales infractores de la ley, según los portavoces de los libreros. Campo aseguró que en setiembre "tomarían medidas" levantando actas notariales algunos en colegios.
El Consejo Empresarial de Comercio de Vizcaya (Cecovi) aseguró ayer en conferencia de prensa que "una vez más" la venta ilegal de libros de texto que se realiza en los colegios vizcaínos. "Es una medida que se está dando año tras año y es hora de solucionarlo definitivamente", advirtió el presidente de Cecovi, Pedro Campo. Este representante expuso que entre "un 80% y un 90%" de los colegios existentes en Vizcaya infringen la ley. La normativa vigente prohibe la venta de material didáctico en los centros de enseñanza. Esta provincia vasca tiene cerca de 376 colegios entre centros públicos y concertados, aseguró el portavoz de Cecovi. El presidente de la patronal de comercio añadió que la venta de textos escolares es un negocio que maneja un volumen de dinero de entre 1.600 y 2.000 millones de pesetas, según las estimaciones. "Siendo, optimistas sólo [entre] un 10% y un 20% estarían dentro de la legalidad. Si el Departamento vasco de Hacienda tiene tanto énfasis en buscar las bolsas de fraude, nosotros denunciamos una de ellas", afirmó. Campo aseveró que se está infringiendo la ley por vender o distribuir material didáctico incumpliendo los requisitos legales. "Además, muchas de las asociaciones de padres no se dan de alta en el Impuesto de Actividades Económicas", explicó. La agrupación del gremio librero anunció que a partir de setiembre acudirán a varios centros escolares y levantarán actas notariales en las que constatarán si la venta de libros se está llevando a cabo de modo legal o no. Esta iniciativa ya se adoptó el curso pasado en tres colegios privados ubicados en el municipio de Getxo. Gracias a aquella medida, recalcó Campo, este año la oferta de material didáctico en estos tres centros se canalizará a través de las librerías. El representante de Cecovi expuso la problemática que se origina cuando llega setiembre, al inicio del curso escolar. Numerosos centros, públicos y concertados, venden los textos escolares a través de las asociaciones de padres o designando proveedores concretos. "Esto constituye un peligro, ya que existe un número muy importante de librerías en las que están empezando a reducir la plantilla de personal", afirmó Campo. Dionisio de Luis, portavoz de la agrupación de libreros de Vizcaya, reveló que son los centros escolares privados los que mayoritariamente cometen las infracciones. No obstante, señaló que entre los infractores también hay centros públicos y escuelas de idiomas. De Luis recordó que dos reales decretos prohiben a los centros vender directamente libros de estudio. Otro de los aspectos que regula la normativa es el periodo de vigencia de los libros: no pueden ser sustituidos por otros textos hasta que termine el periodo lectivo para el que se eligieron. La problemática que se genera con el comercio de libros se extiende a Guipúzcoa y Álava. No obstante, Campo aseguró que por ahora no han mantenido contactos para alcanzar una solución conjunta. En Galicia la situación, similar a la vasca, ya ha sido solucionada. Falta de voluntad política Los portavoces de Cecovi mostraron su decepción "porque desde el Departamento de Educación del Gobierno vasco, en manos de Eusko Alkartasuna, no existe voluntad política de resolver el problema". Campo explicó que llevan intentando concertar una entrevista con un responsable del departamento desde hace más un mes y la consejería no había atendido a la reclamación de acabar con la ilegalidad. "Hasta la fecha no ha habido ninguna respuesta, ni siquiera para recibirnos", afirmó Campo. "El Departamento de Comercio sí ha sido receptivo a nuestras demandas", añadieron. Los portavoces de la asociación gremial de libreros mostraron su confianza en que los responsables políticos adoptarán una solución.
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