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La versión del ministro de Industria sobre la fuga de cesio en Algeciras es errónea

Los aparatos de rayos X no pueden irradiar si están apagados, y además no contaminan

Un aparato médico de rayos X nunca podrá ser el causante de una contaminación radiactiva. En primer lugar, porque no es una fuente de contaminación; y además porque sólo emite radiación mientras se apriete un botón que pone en funcionamiento el tubo. El ministro de Industria y Energía, Josep Piqué, aseguró el miércoles durante una comparecencia en el Congreso, que la fuga de cesio 137 detectada en la fabrica Acerinox en Algeciras podría tener su origen en chatarra de un equipo médico de rayos X. Los especialistas descartan tajantemente esta posibilidad.

Un aparato médico de rayos X nunca produce contaminación radiactiva, y además para su funcionamiento no necesita cesio; genera radiaciones -no radiactividad- en el momento en que está funcionando, y cuando termina su vida activa los responsables sanitarios rompen los cables, lo dan de baja y después lo tiran como chatarra normal. Estos aparatos no se reciclan ni se venden después de usados.Un portavoz del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) confirmó a EL PAIS que "es imposible" que un aparato de rayos X haya ocasionado la fuga de cesio 137 de Acerinox. Y varios radiólogos consultados por este periódico en diversos hospitales de España manifestaron su preocupación, "ya que se alarma a la opinión pública con explicaciones que no tienen ningún sentido ni justificación científica".

"Un tubo de rayos X se acciona a través de un generador, entonces se emite una descarga de electrones y son éstos los que atraviesan el cuerpo humano. Es entonces cuando se produce una radiación ionizante, que no contamina y que se absorbe parcialmente por las células. En cuanto al cesio, la diferencia es abismal, pues su periodo de duración antes de entrar en el periodo de desintegración es de hasta 30 años y sí puede tener efectos biológicos, ya que la energía que produce es 30 veces superior a la del aparato de rayos X más potente", aseguró José Chocano, secretario general de la Asociación Española de Técnicos de Radiología (AETR).

Funcionamiento

Pero resulta que el cesio 137 no se utiliza en radiología general, aunque es posible que en algunos hospitales que cuenten con un departamento de medicina nuclear le den algún uso. "Una cosa es la irradiación que producen los rayos X y otra muy distinta es la contaminación, que es la presencia indeseada de una sustancia radiactiva en el ambiente. Sólo contaminan los radionucleidos, un aparato de rayos X no contamina, sino que sólo irradia. El ministro se ha equivocado", aseguró Pilar López Franco, especialista de radiología del Hospital de la Princesa, en Madrid.Un portavoz del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) aseguró que, a petición propia, el presidente de este organismo comparecerá ante la comisión parlamentaria de Industria, que se ha pospuesto hasta que el Congreso encuentre un hueco en la agenda.

Jacinto Estarriaga, presidente de la AETR, dijo: "Éste ha sido un lapsus importante del ministro, pues no se puede comparar un tubo de rayos X con un equipo radiactivo". Francisco Castro, portavoz de la organización ecologista Aedenat, aseguró que "esto es un ejemplo de las declaraciones que se hacen para calmar a la opinión pública, sin evaluar las consecuencias. Cualquiera que sepa un poco de instalaciones radiactivas no podría afirmar que el origen pudo ser de un aparato de rayos X".

Los rayos X son una radiación no visible -con una frecuencia extremadamente alta- del espectro electromagnético. Sus propiedades (son capaces de penetrar superficies sólidas) hacen que se utilicen en numerosas aplicaciones científicas, médicas e industriales. Las aplicaciones médicas son de las más antiguas y corrientes.

La empresa Acerinox tiene suscrito con sus proveedores un contrato en el que se exige que todas las chatarras que le proporcionan sean inertes. Como este incidente no es el primero que ocurre, pues se han dado más casos con productos procedentes de la Europa del Este y de la desintegrada URSS, el Organismo Internacional de la Energía Atómica, que pertenece a Naciones Unidas, ha organizado un congreso que se llevará a cabo en septiembre en París, para regular todo lo que tenga que ver con residuos de baja actividad radiactiva.

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