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Los 'euroescépticos' alemanes redoblan sus críticas

Pilar Bonet

Los euroescépticos alemanes no se dan por vencidos y redoblan los esfuerzos por hacer oír sus voces, en vísperas de las sesiones parlamentarias del 23 y el 24 de abril, cuando el Bundestag (cámara baja) y el Bundesrat (cámara alta), respectivamente, deben debatir sobre la introducción del euro y sobre los criterios de cualificación para la moneda única.El jefe del Gobierno de Sajonia, Kurt Biedenkopf, uno de los paladines del euroescepticismo germano y, en el pasado, el rival más peligroso de Helmut Kohl dentro de la Unión Demócrata Cristiana (CDU), ha vuelto a pronunciarse a favor de retrasar la introducción de la moneda única en una carta y un memorándum enviados a sus colegas de la dirección de la CDU.

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La insistencia de Biedenkopf en fijar sus posturas se produce cuando quedan pocos días para la presentación de los informes sobre el cumplimiento de los criterios para el euro, que han sido elaborados respectivamente por la Comisión Europea y por el Instituto Monetario Europeo. Ambos informes se darán a conocer simultáneamente en Bruselas y en Frankfurt el próximo día 25 de marzo. Dos días más tarde, el 27 de marzo, el Gobierno alemán escuchará al presidente del Bundesbank, Hans Tietmayer.

Los dirigentes de la CDU parecen haber conjurado el peligro de que Edmund Stoiber, el jefe del Gobierno de Baviera y otro de los principales euroescépticos, vote en contra del curo en el Bundesrat. Stoiber pertenece a la CSU (Unión Social-Cristiana) que está coaligada con la CDU en el gobierno federal alemán.

Según Biedenkopf, las críticas al curo en Alemania se han convertido en un tabú. Stoiber acusa a la dirección del partido que preside Helmut Kohl de no haber debatido sobre la introducción del curo y se queja de la falta de democracia interna.

Limitar los riesgos

En su carta a los colegas de la dirección del partido, Biedenkopf opina que no hay condiciones para una unión monetaria europea formada por once países. Consciente de que estos argumentos llegan ya tarde para impedir la moneda única, Biedenkopf señala que si el Bundestag se decide a aprobar el euro, se debe proceder a limitar los riesgos vinculados con el comienzo de la unión monetaria.El político propone votar conjuntamente con el euro un conjunto de precisiones. Eso incluye entre otras cosas dejar constancia de que no deben aumentar las cargas de Alemania en concepto de contribuciones y rendimientos. Asimismo, los países participantes en la moneda única no tendrán ningún derecho a beneficiarse del fondo de cohesión, ya que supone que el proceso de cohesión ha concluido con éxito.

Las altas tasas de paro en uno de los países participantes, señala Biedenkopf, no pueden justificar la transgresión de los criterios de estabilidad. "De la voluntad del gobierno alemán de tener en cuenta estas precisiones dependerá el voto de Sajonia sobre el euro en el Bundesrat", dijo.

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Sobre la firma

Pilar Bonet
Es periodista y analista. Durante 34 años fue corresponsal de EL PAÍS en la URSS, Rusia y espacio postsoviético.

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