La oposición catalana rechaza por centralista el plan de infraestructuras de Arias-Salgado

Los partidos catalanes en la oposición (PSC, IC, ERC), salvo el PP, expresaron ayer su incredulidad, primero, y su indignación, después, ante el plan del Gobierno del PP para invertir prioritariamente en Madrid y su área de influencia. Las afirmaciones del ministro de Fomento, Rafael Arias-Salgado, sobre la conveniencia de acomodar las obras al calendario electoral fueron calificadas de "cínicas" por varios diputados. Los dirigentes de CiU, en cambio, callaron pero recordaron que Jordi Pujol visita hoy al ministro de Fomento. El alcalde de El Prat consideró "intolerables" las palabras de Arias-Salgado.

Arias-Salgado afirmó en una reunión con parlamentarios del PP que el Gobierno debía concentrar las inversiones en un radio máximo de 200 kilómetros alrededor de Madrid para compensar el desequilibrio provocado por la política de los últimos 30 años. Pío García Escudero, presidente del PP en Madrid, añadió ayer que es "lógico" que el Gobierno invierta en el centro ya que se trata de la "capital de España". "El Gobierno socialista se dedicó a invertir en otras capitales", añadió.La reacción de la oposición catalana fue de indignación, en especial con las partes del discurso de Arias-Salgado en las que se refería a la relación entre inversiones y calendario electoral como criterio último para decidir las inversiones.

El primer secretario del PSC, Narcís Serra, acusó al Gobierno del PP de estar haciendo una utilización sectaria y partidista sin precedentes de las inversiones públicas. El líder parlamentario de los socialistas catalanes, Joaquim Nadal, afirmó que el PP desprecia las necesidades de Cataluña en materia de infraestructuras y que el Gobierno nacionalista de la Generalitat es cómplice de esa actitud de "exclusión de Cataluña". El PSC anunció que mañana interrogará a Jordi Pujol en el Parlamento catalán sobre la opinión que le merece la política de inversión en infraestructuras diseñada por el ministro de Fomento. "Pujol se ha dejado engañar [por el Gobierno del PP] por un plato de lentejas", destacó Nadal, remitiéndose a uno de los lemas del Libro Negro del pacto PP-CiU que ha elaborado en Internet el PSC.

El diputado Joan Boada, de IC, explicaba que al principio creía estar ante una inocentada. "No podía creer que alguien fuera tan irracional como para someter la planificación a intereses partidistas y electorales". El alcalde de El Prat, Lluís Tejedor (IC), afirmó que se trata de algo "muy grave, intolerable". "Nunca habíamos visto un ministro que sustituyera la planificación por la repartidora electoral", añadió.

Crítica

El Partido Popular aprovechó la oportunidad para criticar a los socialistas, pero eludió hablar de las palabras de Arias-Salgado y, sobre todo, evitó pronunciarse sobre la afirmación del ministro de que debe potenciarse Barajas y dejar el aeropuerto de El Prat como "subsidiario".En las mismas fechas en que Arias-Salgado explicaba su concepción de las infraestructuras a sus correligionarios, un alto cargo de su ministerio se reunió con el grupo Esbornac, especialista en estudios sobre el ferrocarril. Les dijo: "Haremos el AVE porque está firmado en el pacto de gobernabilidad, que si no... de qué", antes de añadir que el ministerio hubiera preferido otras soluciones. "Está claro lo que pretenden: marginar a Cataluña", explicó Boada.

La oposición, tras criticar el "centralismo del PP" y afirmar que "huele al régimen anterior", dirigió los dardos contra Pujol. para recordar que el PP hace lo que hace con su apoyo. "¿Qué tiene que decir Pujol?" se preguntaba Lluís Tejedor. "El PP favorece a Madrid en detrimento de Barcelona con los votos de Pujol", dijo un portavoz municipal. CiU mantuvo un mutismo absoluto. Salvo el consejero de Medio Ambiente, Joan Ignasi Puigdollers, cogido de improviso en una entrevista radiofónica matinal, el resto de los políticos convergentes optó por el silencio. Puigdollers estuvo comedido y calificó las declaraciones del ministro de "desafortunadas".

El silencio del Gobierno catalán fue atribuido por un portavoz oficial a la reunión prevista para hoy entre el presidente de la Generalitat, el consejero Pere Macias, responsable de Obras Públicas, y el ministro de Fomento,

Tras la reunión, los políticos catalanes informarán de su contenido. El diputado Joan Boada, de IC, adelantó el resultado: "Dirán que todo va bien y que han reconducido la situación, pero la verdad es que en Cataluña el Estado hace tres años que no invierte un duro".