Los ministros de la UE desembarcan en la Cumbre de Kioto y plantan cara a EE UU
Los europeos exigen que los países industrializados reduzcan por igual sus emisiones
La UE fue contundente ayer en Kioto: "Todos los países del mismo nivel, es decir, Estados Unidos, la Unión Europea y Japón, tienen que tener los mismos niveles de reducción de gases de efecto invernadero". Así de clara fue ayer la declaración de la comisaria europea para el medio ambiente Ritt Bjerregaard, a la salida de la reunión que los ministros de la UE con competencias en medio ambiente celebraron en la Conferencia sobre el Cambio Climático. Quedaba así rechazado el intento estadounidense de que se acepten compromisos de reducción de emisiones diferenciados para los países desarrollados.
La ministra española Isabel Tocino fue aún más enérgica: "Si EE UU quiere algún tipo de diferenciación, tiene que reducir más sus emisiones que la UE porque contamina más, es el más contaminante del mundo".Para cumplir el compromiso, europeo en España, Tocino explicó que se pondría en marcha un programa nacional de lucha contra el cambio climático. La ministra incluso anunció que propondría en el próximo consejo de ministros comunitario que "pase lo que pase en Kioto, si no se consiguiera un compromiso, o si no fuera satisfactorio", los europeos nos comprometamos unilateralmente a cumplir la propuesta nuestra. La oferta europea consiste en reducir las emisiones de la UE en un 15%, respecto al nivel de 1990, en el 2010, con un reparto intracomunitario de las cargas. EE UU propone estabilizar sus emisiones de 1990 entre el 2008 y el 2012.
Los ministros europeos se reunieron ayer durante casi cuatro horas en el palacio de congresos de Kioto, donde se celebra desde hace una semana la Conferencia de la Convención de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. El objetivo de la reunión ministerial era fijar las posiciones de la UE de cara a los tres últimos días de la cumbre, que acaba el próximo miércoles y que debería establecer un protocolo que obligue a los países desarrollados a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero que provocan el cambio climático.
Esperanza en Gore
Entre otros puntos, los ministros europeos abordaron la sugerencia de reducción de emisiones que ha resumido el comité de todas las partes. "Está absolutamente claro que no apoyamos la sugerencia de que la UE podría reducir sus emisiones en un 10%, EE UU en un 5% y Japón en un 2,5%", declaró Bjerregaard. "Está claro que EE UU puede hacer mucho más de lo que propone y esperamos que cuando llegue Al Gore [hoy interviene en la cumbre el vicepresidente de EE UU], traiga una nueva propuesta".En esta cuestión, Tocino aseguró: "Hay un acuerdo unánime entre todos los ministros de la UE acerca de que todos los países industrializados acepten el nivel de reducción propuesto por Europa. Éste es el primer requisito y, si no, no podemos seguir negociando". Y añadió: "Aquí no hay fisuras, estamos liderando porque nos hemos tomado muy en serio que estamos ante el problema más grave, sin lugar a dudas, que tiene la humanidad ante el siglo XXI".
Tocino dijo que España, que en el reparto intracomunitario de la carga de la reducción de emisiones propuesta puede aumentar hasta un 17% en el 2010 con respecto a 1990, subiría hasta un 45% sin este compromiso. "Si lo dejamos en un 17% estamos reduciendo en un 28%", concluyó. Similar razonamiento hace la delegación estadounidense cuando dice que sin un compromiso de estabilización por su parte, sus emisiones aumentarían un 35% en el 2010 respecto a 1990.
La ministra aseguró que España está "en disposición de garantizar que va a cumplir el compromiso europeo". Los sectores implicados, dijo, son industria, energía y transporte, en primer lugar, reformas en agricultura y aumento de eficacia energética en la edificación. Además, subrayó, "vamos a aumentar la utilización de las energías renovables en un 12%".
Los ministros europeos trataron la relación de la UE con los países en vías de desarrollo y Bjerregaard explicó que es preciso que los países ricos tengan compromisos de reducción de emisiones, porque si no es muy difícil que los países en desarrollo asuman compromisos voluntarios.
Respecto a las medidas complementarias que pueden ser incluidas en el protocolo de reducción de emisiones y que, como muchos han advertido, pueden ser utilizadas como mecanismos que desvirtúen el contenido de los acuerdos si no se deja muy claro cuáles son sus límites y condiciones, la comisaria europea de medio ambiente afirmó: "No, no queremos agujeros de ningún tipo ni en los sumideros de CO2 ni en el mercado de emisiones contaminantes".
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