El pescado, más caro
El pescado y los productos frescos han entrado en una escalada de precios. El lenguado, bacalao fresco, bonito.... han aumentado hasta un 60% como consecuencia de su drástica disminución. A su vez, paradojas de la nueva situación, los precios a pie de puerto han bajado notablemente puesto que no abundan los transportes dispuestos a desafiar el bloqueo.
La Administración está acelerando los trámites para que el pescado menos valorado puede ser transformado en harinas para alimentación de animales, antes de que se pudra. También las empresas de congelación están absorbiendo buena parte de las existencias.
Mayores dificultades tienen, sin duda, los exportadores de frutas y legumbres. "No hay prácticamente exportaciones hacia los países del norte de Europa y mucho menos a ultramar", se lamentó ayer el presidente del comité exportador de estos productos Henri Balssa.
Un portavoz de la Federación de Empresas de Comercio y Distribución (FCD), que agrupa a 620 hipermercados, 5.200 supermercados y 8.500 comercios, declaró que "en Francia han comenzado a escasear todos los productos frescos de corta duración".
