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Las localidades de la ruta del Quijote piden que aumente la presencia del mundo cervantino

Una obra de teatro celebra el 450º aniversario del nacimiento de Cervantes

Los pueblos de la ruta del Quijote: Alcázar de San Juan, Argamasilla, Campo de Criptana y El Toboso recordarán el 450' aniversario del nacimiento de Miguel de Cervantes -que se celebra el 9 de octubre- con el montaje de la obra Don Quijote, cuyo preestreno fue anoche en el pueblo de Dulcinea, por iniciativa del Instituto Internacional de Teatro del Mediterráneo (IITM). Los alcaldes manchegos reconocen la deficiente infraestructura turística de la zona y proponen al Gobierno reflexionar de cara al año 2005, cuando se cumplirá el cuarto centenario de la primera edición de El ingenioso hidalgo don Quijote de La Mancha, de Miguel de Cervantes, para que España mejore la presencia del mundo cervantino.

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Un homenaje itinerante

La Mancha real está vivificada por La Mancha de Cervantes. Donde los pueblos se disputan el privilegio de poseer los escenarios de las hazañas, de las fiestas, de las pernoctadas o, al menos, de un tramo de la ruta empleada por Don Quijote.Pero El Quijote no ha sido bien aprovechado como la mejor guía turística del mundo. Mientras Don Quijote tienta a los lectores a conocer sus lugares, algunos de los que llegan hasta La Mancha no saben qué camino coger y deben descubrir la comarca sin un itinerario sugerido. "Hemos pecado un poco de cierto localismo", reconoce el alcalde de Campo de Criptana' Joaquín Fuentes Ballesteros, al referirse a los trabajos de promoción que realiza cada pueblo, y se lamenta de que "es complicado integrar las individualidades" . Coinciden en ello los alcaldes de Alcázar de San Juan, José Eugenio Castellanos, y de El Toboso, Natividad Martínez, y el director del Área de Cultura de Argamasilla, Pedro Padilla, que afirma: "Es evidente la falta de infraestructura".

Hace tres años los alcaldes de la zona se reunieron para tratar de organizar un itinerario cervantino, pero ahí quedó todo, recuerda Pedro Padilla. Una ruta que debería estar promoviendo también, según los alcaldes, la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, pero, "como no la mueven, estamos tratando de crear una red o consorcio para darle forma por nuestra cuenta asegura el director del Área Cultural de Argamasilla.

Casualidad

Los alcaldes quieren que ya no sólo se llegue allí por casualidad. Este año el interés se ha centrado en la preparación de un proyecto para la Unesco para que la ruta del Quijote sea declarada Patrimonio de la Humanidad. Muchos pueblos quieren entrar en la ruta, pero "hay que determinar muy bien qué sitios tienen realmente un legado del Quijote", afirma la alcaldesa de El Toboso. "No podemos hacerla muy, amplia porque al final no hacemos ni la ruta central", advierte el director de Cultura de Argamasilla.

En estas localidades los recuerdos del libro hacen fila, cuando se ve en cada esquina el nombre de las calles: Sancho, Del Verde Gabán, Dulcinea, Aldonza Lorenzo, Rocinante, Teresa Panza, La Molinera, Bachiller Sansón Carrasco, De la Blanca Luna, Cervantes, Los Molinos, Don Quijote o Alonso Quijano.

Dentro de los lugares imprescindibles para desandar los pasos de Don Quijote está Argamasilla, el posible lugar perpetuado gracias a un amañado olvido. Francisco Pacheco habría sido la inspiración de Cervantes, según da fe el cuadro de la Virgen de la Caridad de Illescas, en la iglesia de San Juan Bautista,

Azorín es uno de los que respaldan la hipótesis de que la primera línea del Quijote se refiere a este pueblo donde está la Cueva de Medrano, prisión de Cervantes entre 1601 y 1603, por quedarse con parte de los impuestos de la orden de San Juan, en la que habría escrito: "En un lugar de La Mancha de cuyo nombre...

El siguiente paso de la ruta está a 30 minutos de Argamasilla. En Campo de Criptana, donde Don Quijote exclamaría: "La aventura va guiando nuestras cosas mejor de lo que acertáramos a desear; porque ved allí amigo Sancho Panza, donde se descubren treinta, o poco más, desaforados gigantes con quien pienso hacer batalla...". Quedan 11 de aquellos gigantes regados por la cima del cerro de la Paz hasta donde se ha trepado el poblado. Uno de los molinos conserva, la maquinaria y el objetivo del Ayuntamiento es poner a funcionar dos o tres para hacer más atractivo el recorrido. "Además hemos iniciado una campaña de concienciación ciudadana para recuperar los colores de Criptana: el blanco y el añil en las fachadas de las casas", afirma el alcalde, Joaquín Fuentes.

El Toboso

Otro lugar obligado es EI Toboso, tierra de Aldonza Lorenzo, nombre terrenal de Dulcinea. Allí, frases de El ingenioso hidalgo guían desde las esquinas los pasos del visitante hasta la casa de la "emperatriz", convertida en Casa Museo. Las calles se hacen más antiguas y angostas a medida que se avanza, hasta llegar a la iglesia junto a una pequeña plazoleta y frente a un Quijote hincado sobre una rodilla rindiendo pleitesía a una Dulcinea de falda bombacha y pañuelón en la cabeza. Dos calles más abajo, la Casa Museo Dulcinea.

El Toboso tiene también el Centro Cervantino, donde reposan más de 220 ediciones de El Quijote, en 38 lenguas diferentes. Casi todos los libros son donados y dedicados por jefes de Estado. Desde reyes europeos, hasta Mussolini, jefes de Estado como Reagan, Miterrand, Walessa.... y también Felipe González. Variadas ediciones, como el manuscrito de dos tomos de 1926 donado por los reclusos del reformatorio de Ocaña; o la reproducción de 1615; y en lenguas que incluyen el latín macarrónico.

A estos tres lugares se suman Puerto Lápice, en cuyas ventas se habría armado caballero el Alonso Quijano de Cervantes, y las lagunas de Ruidera y la cueva de Montesinos.

"Ya es hora de que La Mancha se organice y mejore la oferta turística y cultural", afirma el alcalde de Alcázar de San Juan. "Para eso no basta con la iniciativa de los ayuntamientos, sino que se requiere de la presencia del Gobierno, porque se trata de una postal de España".

Proponen los alcaldes que este 450' aniversario del nacimiento de Cervantes sea la ocasión para reflexionar de cara al 2005, cuando se cumplirá el cuarto centenario de la primera edición de El Quijote, para que España sea aliada del mundo cervantino.

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