El Gobierno espera 200.000 contratos fijos más al año con la reforma laboral que hoy entra en vigor

El Gobierno prevé que el número de contratos indefinidos aumente 200.000 al año, como efecto de la reforma laboral pactada por la patronal y los sindicatos y de las bonificaciones e incentivos aprobados ayer en Consejo de Ministros. Si esa estimación se cumple, tendrá un coste anual de 100.000 millones de pesetas, por la reducción de cotizaciones a la Seguridad Social y las ayudas fiscales a las pequeñas empresas (las que tributan por módulos) que creen empleo fijo.

La reforma laboral entrará en vigor hoy, cuando el Boletín Oficial del Estado publique los dos decretos ley que el Ejecutivo aprobó ayer y remitió al diario oficial con indicación expresa de que ese mismo día empiezan a tener efectos jurídicos. Una de esas normas recoge el contenido de los pactos entre patronal y sindicatos y la segunda los incentivos aprobados por el Gobierno para estimular los nuevos contratos fijos con despido más barato.El ministro de Trabajo, Javier Arenas, anunció ayer que, como efecto de esas medidas, estima que los contratos indefinidos aumentarán en tomo a los 200.000 al año. Arenas precisó que "no es un compromiso del Gobierno; es nuestro deseo y un objetivo que debe ser compartido por todos, especialmente por los empresarios".

Esa previsión incluye los nuevos contratos fijos que se firmen y la conversión de contratos temporales vigentes y, si se hace realidad, mejoraría notablemente la situación actual. En los últimos años se han venido realizando de media sólo 200.000 contratos indefinidos a tiempo completo y 100.000 a tiempo parcial. Arenas confía que se reduzca notablemente la tasa de temporalidad, que en estos momentos alcanza al 35% de los trabajadores asalariados españoles. La media europea es sensiblemente inferior, el 11,5%.

Las bonificaciones en las cotizaciones sociales (ver gráfico) y los incentivos fiscales para pequeñas empresas tendrán un coste de 100.000 -millones de pesetas sí se cumplen la- previsión de 200.000 contratos fijos más. Arenas aseguró que ello no va a afectar "en absoluto" a ninguna política activa de empleo ni al presupuestos del Inem. El coste se financiará con el dinero ahora destinado a estímulos a la contratación temporal que desaparecen) y con -el ahorro que se producirá en prestaciones por desempleo.

En concreto, las subvenciones directas y bonificaciones al empleo temporal suprimidas tenían un coste de 16.000 y 17.000 millones de pesetas, respectivamente.