CiU exige que la inversión crezca el 15% para apoyar los Presupuestos de 1998

Los nacionalistas catalanes condicionarán su apoyo a los Presupuestos del Estado de 1998 a que haya un incremento del 15% en las inversiones públicas, para situarlas al mismo nivel que en 1996, según explicó ayer el portavoz de CiU en el -Congreso, Joaquim Molins. Otras dos condiciones prioritarias de CiU en la negociación presupuestaria serán la financiación de la sanidad pública y la aplicación de la LOGSE.

Molins reiteró la apuesta de los nacionalistas por la estabilidad política como vía para garantizar el progreso económico del país y la integración en la Unión Monetaria Europea. A pesar de ello, advirtió que si el Gobierno del Partido Popular no satisface estas demandas "no es inconcebible que Convergencia i Unió [CiU] pueda votar al margen de los presupuestos". No obstante, el propio Molins reconoció que este último supuesto es muy poco probable. "El Gobierno es consciente de que no daremos nuestro voto a cualquier presupuesto", admitió.El portavoz de CiU ya ha mantenido una primera reunión con el vicepresidente económico del Gobierno, Rodrigo Rato, para iniciar la negociación presupuestaria. Ambos han analizado las grandes variables presupuestarias que conforman el Plan de Estabilidad aprobado por el Gobierno.

CiU considera "fundamental" que las inversiones directas del Estado, que en 1997 han caído el 15% respecto al año anterior, se recuperen al menos en ese mismo porcentaje, al margen de los recursos procedentes de mecanismos extrapresupuestarios -como las privatizaciones- y que puedan destinarse a inversiones.

Carreteras y ferrocarril

Molins subrayó que las inversiones públicas contribuyen a mejorar la economía, y puso especial énfasis en la dotación de infraestructuras de transportes -carreteras y ferrocarriles- El político nacionalista se refirió expresamente a la construcción de la línea del AVE entre Madrid y Barcelona y la frontera francesa y al saneamiento económico de Renfe.

El portavoz recordó asimismo que el Presupuesto de 1998 deberá prever un nuevo sistema de financiación de la sanidad pública que habrá de permitir sanear las arcas de la Generalitat. El peso de la asistencia sanitaria en las cuentas de la Administración catalana es superior al 30%, mientras que en el Presupuesto del Estado se sitúa en el 10%.

CiU también reclamará en la negociación presupuestaria mayores recursos para la aplicación de la LOGSE, ya que la Generalitat es una de las administraciones que más ha extendido la reforma educativa. "Este asunto nos hará luchar", pronosticó Molins.

El diputado nacionalista explicó que habrá que depurar las técnicas presupuestarias para que las cuentas del Estado para 1998 se ajusten a los criterios de convergencia europea, ya que en el presupuesto de este año se utilizaron técnicas "bastante groseras", como la congelación salarial de los funcionarios o la reducción de las inversiones. CiU no quiere que se recurrra de nuevo a estas medidas.