_
_
_
_
Entrevista:

"La UE no ha perdido nada en el pacto con Estados Unidos sobre Cuba"

Xavier Vidal-Folch

Leon Brittan, de 58 años, británico y conservador, es el vicepresidente segundo de la Comisión, responsable de Comercio Exterior de la Unión Europea (UE) y de relaciones con Estados Unidos y China. Arquitecto, junto al norteamericano Stuart Eizenstat, del reciente acuerdo UE-EE UU para desactivar el litigio provocado por la ley Helms-Burton, que persigue a las inversiones europeas en Cuba. Considera que el pacto ha beneficiado a Europa más que el pleito.

Pregunta.¿Cumplirá EE UU sus compromisos?

Respuesta. Su interés es cumplirlos. Ellos presionaron para alcanzar un acuerdo. Yo estaba preparado para proseguir el panel [el tribunal arbitral de la Organización Mundial de Comercio (OMC], no con objeto de conseguir un triunfo jurídico, sino para proteger los intereses de la industria europea. En Washington esto les preocupaba mucho, por la mala imagen que le reportaría. Hemos completado nuestra protección. Pero si no cumplen, tenemos todas nuestras armas intactas y podemos reanudar el panel.

P. Pero no todo depende del Gobierno. Está el Congreso.

R. Del Congreso sólo depende un elemento del acuerdo. Pero si ésa es la naturaleza del sistema político norteamericano, la respuesta es negociar teniéndolo en cuenta, no rechazar la negociación, sino protegernos. Nosotros no hemos perdido nada.

P. Pero algunas promesas obtenidas por la UE son vagas.

R. Ganamos mucho. Primero: el panel lo presentamos sólo' contra la ley Helms-Burton. Yo insistí en que el acuerdo incluyera también las inversiones en Libia e Irán. Se resistían, alegando que nada tenían que ver. Pero estaban relacionadas por, que eran manifestaciones de la extraterritorialidad, que nos perjudicaban. Eso no lo habríamos obtenido con el pleito,pues no era el objeto del panel .Segundo: la suspensión del título tercero [por el que las empresas norteamericanas pleitean contra las europeas inversoras en Cuba] hasta ahora se producía cada seis meses; ahora lo será por todo el mandato del presidente Clinton. Tercero: la enmienda del título cuarto [negativa de visados], único elemento que involucra al Congreso. Cuarto: la negociación global en la OCDE para desincentivar las inversiones en propiedades nacionalizadas es algo que ya estábamos haciendo. Lo nuevo es que EE UU acepta lo que antes rechazaba, discutir también sobre la extraterritorialidad. Pero se trata solo de inversiones futuras. Insistí en desoír propuestas sobre propiedades que ya están en manos de europeos.

P. Luego confía en que todo será un camino de rosas.

R. No, no estoy confiado. No todo el problema está resuelto aún. Sólo lo estaré cuando lleguen las derogaciones y las enmiendas. Pero el acuerdo garantiza progresos a la UE y modifica la política norteamericana. Se han obtenido ganancias sustanciales. Y aunque sólo hubiera sido. una, ya habría sido un progreso, porque no hemos cedido nada.

P. La UE ha sido generosa. Ha retirado el panel, el deseo máximo de EE UU, pues lo iba a perder. Pero Washington no retira otros pleitos ante la OMC que quizá puedan ganar.

R. No hemos sido generosos. No les hemos dado nada que hubiéramos podido obtener ganando el pleito. ¿Eso es generosidad?

P. ¿Qué final prevé para el litigio del plátano?

R. Este panel no ha acabado. Nunca hago apuestas. Prefiero trabajar para ganarlo.

P. Algunos Gobiernos de la UE criticaron el acuerdo y le acusaron de secretismo.

R. Los Quince querían un acuerdo y lo aprobaron. Podrían haberlo rechazado. Es imposible llevar una negociación de ese calibre si todo el mundo conoce todos los detalles. Tiene que haber confianza en el negociador. Nadie rechazó el acuerdo ni criticó su contenido. Podrían haberlo hecho. Las críticas formales también han sido útiles para EE UU.

P. ¿Qué consecuencias saca de todo el asunto?

R. En el pasado, EE UU ha aprobado muchas veces leyes con efectos extraterritoriales, que nos perjudicaban, y nuestras respuestas eran ineficaces. En este caso, hemos progresado mucho en evitar la aplicación de ese tipo de leyes. Eso ilustra bien la necesidad de que la OMC dispusiera de un mecanismo arbitral, lo que exigieron países como España. Es de interés estratégico. Es la evidencia de que la firma de la Ronda Uruguay no fue un error, sino al contrario. Los recientes acuerdos, en tecnología de información y telecomunicaciones, demuestran que la liberalización comercial avanza. No es que hayan fallecido todas las actitudes reticentes, pero está claro que hay apoyo a la política de liberalización comercial y que ésta se va imponiendo.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_