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Reportaje:

Ventajas e inconvenientes de una oveja clónica

"No vemos razones clínicas para clonar seres humanos", ha dicho el artífice de "Dolly"

Ayer continuaron las reacciones ante la salida a escena de Dolly, la oveja clónica obtenida por primera vez en la historia a partir de una sola célula de un anima adulto. ¿Se pueden clonar seres humanos?, le preguntaron ayer a lan Wilmut, el artífice de Dolly: "Lo hemos dejado claro, no vemos motivos clínicos para hacerlo", fue su respuesta. "Con mayúsculas y bien grandes: no es posible de modo inmediato", recalcó Ron James, director de PPL Pharmaceuticals, la empresa que financia los trabajos de Wilmut en el Instituto Roslin de Edimburgo. El presidente Clinton se apresuró a convocar al comité asesor federal de bioética para que revise las implicaciones de las técnicas de clonación para los seres humanos y quiere una respuesta en 90 días. En España, el ministro de Sanidad, José Manuel Romay, advirtió que los avances en estas técnicas deben respetar la dignidad de las personas, ya que la especie humana exige un tratamiento especial.Clonar genes, clonar animales completos... Cada uno de estos pasos ha supuesto un grado de complejidad mayor en los laboratorios biológicos. La clonación se da en los animales, aunque muy pocas veces: dos hermanos gemelos univitelinos son clónicos. Dolly, que ahora tiene siete meses, es el último paso en la fa bricación de animales idénticos. También es un primer paso, a la vista de las perspectivas que abre, en las posibilidades de manipular la naturaleza. En el próximo siglo, puede haber corrales de gallinas clónicas que pongan huevos con cáscara más resistentes, rebaños que produzcan me dicamentos en la leche y cerdos productores de corazones y riño nes humanos para trasplantes. El truco es la combinación de la in geniería genética y la clonación.

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Cuando hace dos décadas los científicos aprendieron a manipular el ADN, a replicar genes, abrieron las puertas a la ingeniería genética. Mientras tanto, en los laboratorios de fertilización in vitro se aprendía a manipular la reproducción, algo imprescindible para poder clonar.

En embriones

La clonación había llegado en los años ochenta a controlar los procesos de división celular en los primeros estadios de desarrollo de embriones fecundados. Un puñado de células aún sin diferenciar entre las que deben acabar siendo ojos o pierna o hígado de un individuo adulto se separan artificialmente y cada una acaba formando un individuo completo. Las estirpes de ratones clónicos de este tipo son habituales en los laboratorios. Hace cuatro años, Wilmut y su equipo lograron hacer clones transfiriendo la información genética del núcleo de células embrionarias de oveja y nacieron varios corderos.Ahora llega Dolly. La novedad reside en que su información genética no procede de células de embrión, sino de célula ya diferenciada de glándula mamaria de una oveja de seis años. Hace un año, investigadores estadounidenses clonaron células de embriones humanos; no eran viables y el experimento no paso de ahí tras un enorme revuelo internacional.

¿Clones para qué? Si Dolly fuera una oveja modificada genéticamente, que no lo es, podría producir medicamentos para humanos o animales mejores. Éste es el objetivo inmediato de sus creadores. También servirán los clones para disponer en los laboratorios de suficientes animales de experimentación como modelos de enfermedades en los que investigar y ensayar antes de pasar a los hospitales. La clonación masifica los recursos disponibles por ingeniería genética, dicen los científicos.

¿Existe algún inconveniente en que los animales sean idénticos? "Sí", contesta Wilmut, "habría un riesgo de que el grupo de animales fuera susceptible a una infección concreta, por tanto no sería aconsejable que toda la ganadería de una granja procediera de un clon". En todo caso, los genetistas recuerdan que al desarrollarse un individuo se van produciendo ligeras variaciones genéticas. Si se hicieran miles de Dollys, algunas no serían exactamente iguales.

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