Terenci Moix obtiene en Sevilla el I Premio de Novela Fernando Lara
'El amargo don de la belleza' está ambientada en Egipto
El escritor catalán Terenci Moix (1942) se alzó anoche en Sevilla, tal y como estaba previsto, con el primer Premio de Novela Fernando Lara, dotado con 20 millones de pesetas, creado por el patriarca de Planeta, José Manuel Lara, en memoria de su hijo, muerto hace un año en accidente de tráfico. La novela de Moix, El amargo don de la belleza, es también el regreso del escritor a Egipto. "No es una biografía de Nefertiti, aunque Nefertiti, que para mí es como Rebeca, es una obsesión que aparece como sombra al fondo de toda la novela. Nefertiti era una mujer dura y poderosa. Una reina madre" dijo el escritor, pasada la medianoche.
Satisfecho y radiante por haber obtenido un galardón que lleva el nombre de su amigo personal Fernando Lara, el escritor declaró tras el fallo del jurado: "Yo quería apasionadamente tener este premio. Fernando, desde que gané el Premio Planeta en 1986 con otra novela situada en Egipto, se pasó años invitándome a volver a escribir sobre este tema. Le debía esta novela".Contra las informaciones periodísticas que especulaban con la hipótesis de que Moix envió su manuscrito fuera de plazo al premio, el escritor desmintió esa anomalía con rotundidad: "No es cierto que yo enviara mi novela fuera de plazo. Tengo aquí la papeleta con la fecha. Puedo asegurar que no ha habido la menor anomalía". Sin embargo, al menos dos miembros del jurado del premio, que fue presidido por el periodista Luis María Anson, revelaron a este periódico que recibieron "dos o tres" originales a primeros de agosto, es decir, un mes después de que la editorial les hubiera enviado los manuscritos del resto de las 14 novelas finalistas. El plazo de admisión de originales finalizaba el 30 junio.
Una novela de Torcuato Luca de Tena, El primer y último amor -la historia de un octogenario catedrático jubilado de historia, que se instala en una residencia de ancianos cerca de Jaca y allí revive una historia de amor adolescente pugnó con Terenci Moix por el galardón hasta el final y quedó finalista.
El amargo don de la belleza, un título tomado de un verso de Lord Byron, es una novela historicista, de largo aliento -tiene unas 500 páginas- y muy prolija en el retrato de la vida cotidiana del antiguo Egipto durante el periodo del faraón Akenatón. La novela está situada en una ciudad efímera creada por el faraón, una especie de ciudad-sueño que, según Terenci Moix, representó la belleza, pero que sólo refulgió durante 18 años, hasta acabar desvanecida como "el rosario de la aurora", dijo el escritor. En algunos párrafos Moix reveló que puede recordar incluso "la vida hippy de los años sesenta". También, en cierto modo, puede evocar el sueño disuelto de la época áurea de Hollywood, cuando la factoría del cine fue "la fábrica de sueños".
Moix presentó la novela bajo el seudónimo de Norma Desmond, que era el personaje que interpretaba Gloria Swanson en El crepúsculo de los dioses, la película de Billy Wilder sobre la descomposición de la leyenda de Hollywood y el lado oscuro de las grandes estrellas. Anoche Moix admitió que entre ambas ciudades puede haber "una cierta relación", pero también subrayó que, en realidad, recurrir a esa clase de seudónimos, para él que es un
escritor cinéfilo y mitómano, es también "un modo de desdramatizar" la tensión de los premios literarios.
Babelia
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