America Latina expresa su "enérgico rechazo" a la ley de EE UU que refuerza el embargo contra Cuba

ENVIADO ESPECIAL Doce jefes de Estado o de Gobierno y un vicepresidente de América Latina, reunidos ayer en la ciudad boliviana de Cochabamba, no encontraron, dificultades en la defínición de los grandes problemas regionales y en la necesidad de agrupar esfuerzos contra la pobreza o el narcotráfico y por la democracia y el desarrollo. La discrepancia inicial del Grupo de Río sobre la actitud ante la ley estadounidense Helms Burton acabó en una declaración que mostró su "enérgico rechazo" de la medida que refuerza el embargo contra Cuba. La declaración final incluirá una crítica "a todo intento de imponer sanciones unilaterales con carácter de extraterritorialidad

.Durante cuatro días, economistas, altos funcionarios, y ministros de Asuntos Exteriores de Latinoamérica, excepto Cuba, debatieron la declaración final, que ayer era sometida la consideracion de los gobernantes. La embajadora de EE UU ante la ONU, Albright, trató de influir en la décima cumbre del grupo, al igual que el Gobierno cubano, que al final encontró eco a sus quejas frente a Washington. Madeleine Albright se reunió con el presidente boliviano, Gonzalo Sánchez de Lozada, y tenía previsto hacerlo con varios cancilleres del grupo. Quienes en los pasillos reclamaban severidad contra la actitud "intervencionista" de Estados Unidos, lo hacían desde el anonimato. "Todavía hay pánico a las represalias", admitió un colombiano. Pero finalmente se impuso una declaración en la que se estima que la ley contraviene normas que rigen la convivencia ente los estados e ignora el principio fundamental del respeto a la soberanía, además de constituir una violación del derecho internacional".

Según fuentes oficiales bolivianas, Madeleine Albright busca también adeptos contra la reelección de Butros Butros-Gali, como secretario general de las Naciones Unidas. Los Gobiernos más opuestos a la presencia de Estados Unidos en la reunión son México, Colombia y Brasil.

Otro asunto destacado de la reunión, cuyo asunto fundamental es la pobreza, fue la probable firma, antes de fin de año, de un acuerdo de libre comercio entre el Mercosur (Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay) y el Pacto Andino (Colombia, Venezuela, Ecuador, Perú y Colombia). Surgiría entonces un mercado de 300 millones de personas.