Major inicia la guerra para bloquear la UE hasta que no se levante el embargo de vacuno británico

El minigabinete de guerra formado el miércoles por el primer ministro británico, John Major, para estudiar las medidas más eficaces de bloqueo a la actividad de la Unión Europea (UE), movió ayer sus primeros peones en Bruselas. Habida cuenta de la escasez de reuniones importantes en la sede de la Comisión Europea, el embajador británico para la UE hubo de limitar su tarea de no cooperación a negar el permiso indispensable para la celebración de una reunión destinada teóricamente a revisar el Tratado de Maastricht, reclamada por el Parlamento Europeo.Por su parte, el número dos de la diplomacia británica en Bruselas se vio obligado por prescripción gubernamental a ejercer el derecho de veto en una reunión todavía más anodina desde un punto de vista político: una iniciativa de los socios europeos para hacer frente colectivamente a los desastres de gran escala.

Pese a ello, los representantes comunitarios desestimaron la demanda del Gobierno británico que pretendía obtener una especie de calendario de medidas concretas para lograr el levantamiento de la prohibición de exportar carne de vacuno. Malas noticias para Londres que ayer probó el sabor amargo de una nueva sentencia del Tribunal Europeo que viene a enmendar la plana a los británicos. El alto tribunal considera ilegal la decisión del Gobierno británico de prohibir la exportación de corderos a España por temor a que sean tratados cruelmente. Entretanto, la prensa especula con la posibilidad de que Major anticipe las elecciones, al calor de la oleada de nacionalismo que ha desatado la crisis de las vacas locas.