El Círculo de Empresarios pide al futuro Gobierno que recorte el gasto social

El presidente del Círculo de Empresarios, Carlos Espinosa de los Monteros, calificó ayer de insuficiente el recorte de 180.000 millones de pesetas en el gasto público que ha anunciado el vicesecretario del PP Rodrigo Rato. "El problema es de una magnitud mayor", dijo Espinosa de los Monteros, por lo que "habrá que tomar medidas drásticas e impopulares" en el gasto social.El presidente de este grupo de presión empresarial, situado a la derecha de la patronal CEOE, señaló esta tarea como "urgente" debido a que sólo queda un ejercicio presupuestario (1997) para cumplir los compromisos de Maastricht y formar parte de la moneda única europea. "Hay que actuar con más rigor que hasta ahora y eso significa entrar en todas las par tidas de gasto, incluido el gasto social", dijo Espinosa de los Monteros.

El Círculo ha propagado en anteriores ocasiones el modelo chileno de pensiones (gestión privada y sistema de capitalización; es decir, cada cual percibe en función de sus aportaciones) y ayer defendió una reforma en profundidad de la Seguridad Social española. Propuso tres medidas: Que la subida de las pensiones cada año sea inferior a la inflación, que su cálculo se haga sobre lo aportado durante toda la vida laboral y aumentar la edad de jubilación a los 70 años.

Espinosa de los Monteros calificó de "paños calientes" las medidas contenidas en el Pacto de Toledo (apoyado hace un año por todos los grupos parlamentarios) para la reforma de las pensiones, pese a lo cual pidió que se ponga en marcha "porque si no, quebrará el sistema", auguró.

El Círculo presentó ayer un documento sobre el gasto público, elaborado por Dolores Dizy Menéndez, cuya principal tesis, avalada por su presidente, es que España vive desde hace muchos años "por encima de sus posibilidades", gastando más de lo que ingresa, y advierte que "corno sigamos por este camino lo- único que conseguiremos será arruinar el país".

El patrocinador del estudio, el empresario José María López de Letona -ministro de Industria en la época de la dictadura de Franco- denunció las modificaciones presupuestarias respecto de lo inicialmente aprobado. Según dijo, éstas han supuesto 31 billones de pesetas en los últimos 10 años, un 25% sobre los créditos iniciales. La autora del informe calificó estas desviaciones de "corruptelas administrativas".

López de Letona criticó también que en el año 1995 más de la mitad de la población vivía del sector público, bien porque por ser funcionarios o porque percibían algún tipo de prestación, como pensiones o subsidios de paro. Añadió que entre los años 1960 a 1994 el gasto público pasó de representar el 19,9% del PIB a prácticamente el 50%, y que los ajustes que se han hecho en los últimos años han castigado la inversión y no los gastos corrientes.

La autora del informe propone como "recetas" una mayor disciplina y control del gasto público, la reforma de la Seguridad Social y una revisión del sector público empresarial ya que el Estado no puede ser el "papel secante" de una mala gestión.