"Es un sarcasmo que Aznar dé lecciones de democracia"
Iñaki Anasagasti, 48 años, nacido en Cumaná (Venezuela), considera que Aznar es "hijo del franquismo sociológico" y cree un misterio saber si va a poder controlar a "toda la fachenda" que se le ha metido en el partido. El PNV dice además que los apoyos de banqueros, empresarios y de la Iglesia previos a los comicios atarán de pies y manos al líder del PP. Pero como la política es el arte de lo posible, Anasagasti está dispuesto a hablar de apoyos si hay una transferencia inmediata de la Seguridad Social y del Inem y un desarrollo pleno del Estatuto en la legislatura.
Pregunta. ¿Le duele que Aznar haya dado lecciones de democracia al PNV?
Respuesta. Sí. Fundamentalmente porque el PNV es un partido que tiene 100 años, de los cuales más de 50 los ha pasado proscrito bajo dictaduras de la derecha. Yo he nacido en el exilio. Entonces, que Aznar, hijo del franquismo sociológico, nos venga a dar lecciones de democracia es un sarcasmo. Lo que demuestran sus palabras es una gran torpeza política y que detrás de siglas PP no hay un partido serio.P. Las juventudes de su partido han acuñado una moneda con la inscripción "José María Aznar, caudillo de España por la gracia de Dios".
R. En esta campaña hemos visto en el PP comportamientos de fachenda. Puede ocurrir que Aznar trate de controlar la fachenda o puede ocurrir que se le imponga, y entonces aquí todos estaremos muy vigilantes. Es una auténtica incógnita, porque él ha querido sumar a toda la derecha a su formación. Porque en eso hay que ser claros: Aznar no es el centro, es la derecha.
P. Dibujan ustedes al PP como un cúmulo de intereses...
R. Y un cúmulo de apoyos declarados, como los banqueros tipo Botín, los empresarios como Cuevas, sin olvidar al obispo Elías Yanes, un hombre muy exquisito cuando quiere, pero al final... Los poderes fácticos están apoyando a tope al PP.
P. ¿Va a poder alimentarles tras el 3 de marzo en virtud de ese apoyo previo?
R. Yo creo que Aznar no va a poder. Vamos a ver qué política europea, económica y autonómica hace. Al hombre hay que medirlo en las circunstancias. Es cierto que el clima político de este país está demasiado cargado tras 13 años de Gobiernos socialistas y que la gente quiere abrir las ventanas y que esto se ventile de una vez.
P. Los socialistas se van sin haber desarrollado plenamente el Estatuto de Autonomía y Arzalluz ya ha calificado al PP que viene como "prepotente y altanero". Dice incluso que los vascos van a tener que ponerse el chubasquero si la derecha llega con mayoría absoluta.R. Las mayorías absolutas sólo saben funcionar con mentalidad de rodillo. Pero enfrente va a tener a un partido socialista con un Felipe González, que es mucho González, en la oposición; va a tener a IU tratándose de sacar todas las espinas de lo que ha supuesto su apoyo al PP; va a tener a los sindicatos muy alerta y va a tener a los nacionalismos con una escopeta muy cargada desde el punto de vista dialéctico. Por tanto, creo que todos aquellos que piensan que las cosas se van a calmar a partir del 3 de marzo se equivocan.
P. ¿Y del programa del PP lo desconocen ustedes casi todo, sobre todo en materia de desarrollo autonómico?
R. Yo le pregunté a un diri- gente del PP por qué José Maria Aznar, que tiene tanta admiración por Gran Bretaña, no tiene como los ingleses un gabinete en la sombra para saber quiénes van a ser los futuros ministros y qué programa van a desarrollar. Y él me respondía: "No, porque cuanto menos se hable del programa, mejor, porque así se suma más gente, y no se puede hablar de personas, porque todo aquel que queda excluido empieza al día siguiente a conspirar". Yo creo que la derecha es fundamentalmente conspiradora. Va a ser una legislatura no apta para cardíacos.
P. Si en dos años el PP les promete la transferencia de la Seguridad Social y el Inem y desarrollar el Estatuto íntegramente a lo largo del resto de legislatura, ¿el PNV sumaría sus votos a los de Aznar?
R. Para nosotros, la Seguridad Social y el Inem y el desarrollo íntegro del Estatuto es fundamental. Pero basamos nuestra campaña en cinco temas: el tema europeo, Maastricht y la conver-
gencia. Nos ha preocupado este último viaje de Aznar a Londres, con cantos de sirena hacia el euroescepticismo, y no sabemos si está dispuesto a apostar por la moneda europea. En segundo lugar, la pacificación: el discurso del PP no es elaborado, es un discurso de sheriff de condado del Far West. Queremos saber también que política económica va a llevar adelante, si es con alma, con justicia social reconocible, y que no abra todavía más la sima entre los que tienen mucho y los que no tienen nada. Y luego, el desarrollo del autogobierno para nosotros es fundamental.
P. Aznar parece haber cambiado la máxima de AP de que "el mejor terrorista es el terrorista muerto" por otra que dice "el mejor terrorista es el que va a pudrirse en la cárcel".
R. Cualquier Gobierno tiene que abordar el tema ETA con una serenidad suficiente como para darse cuenta de que tiene que haber medidas policiales pero que el tema tiene calado político. Y si no lo aborda con ese criterio es un problema que no tiene solución, porque no se puede tapar el sol con un dedo. Si hace un discurso nacionalista español duro va a tener enfrente un discurso nacionalista también duro. Y esto no tiene solución.
Lo que hay que hacer es tomarse en serio el Pacto de Ajuria Enea, complementarlo en lo que haya que complementar, pero nos preocupan los cantos de sirena a la derecha y a la extrema derecha. Sobre todo en una sociedad que está, muy golpeada por los atentados de Vallecas, de Valencia, de Tomás y Valiente, de Fernando Múgica, que indudablemente están hechos para provocar y como dice ETA para acumular fuerzas. Pero frente a eso aquí también hay que decir que hubo una dictadura de Franco con estado de excepción, con una política de dureza, con torturas, y el problema no se solucionó, sino que se ha ido agravando. Esto es una conjunción inteligente de medias policiales y medidas políticas. Ahora, ¿está en disposición el PP? Yo creo que si no lo hace lo va a pasar mal porque este tema se va a ir enconando. Si el Partido Popular pretende quedarse en un discurso petrificado se va a quedar solo. Se impone un planteamiento más reflexivo, ir al fondo del problema.
P. ¿Pero cómo explicará el PP a sus votantes la necesidad de esa actitud reflexiva y el cambio en su política antiterrorista?
R. La política es el arte de lo posible y tendrá que cambiar el chip. Al final, la sociedad lo que no va a entender es que el único que queda en Europa con un fenómeno de violencia enquistado sea el tema vasco. No lo dirán en público. La torpeza de los socialistas ha sido la de exhibir los escenarios de diálogo y pacificación.
P. El PNV aspira a subir en votos. Pero con el rabillo del ojo advierte que la campaña que le ha hecho el Gobierno y el juez Garzón a HB puede despertar un voto larvado de la coalición. ¿Les preocupa?
R. El mantener posiciones para nosotros ya es un éxito político. Esta campaña electoral ha sido una campaña muy sucia, muy distorsionada. Indudablemente, la justicia tiene que actuar y ahí no hay nada que decir. Pero lo que más nos ha preocupado de las medidas que ha tomado el juez Garzón es que vuelve a demostrarse que desde Madrid el tema vasco se toca sin ningún tipo de sensibilidad, a manotazos. Así no se van a solucionar las cosas. En campaña electoral todos aplauden las medidas porque dejar de aplaudirlas parece que deja de dar votos. Desde Madrid se están haciendo las cosas sin estudiar el contexto y sin ver que hay otras maneras de actuar, sobre todo para no crispar. Pero también para no despertar, ese voto que indudablemente está muy cansado de la violencia de ETA y que se iba a abstener, pero que ante la movilización que están haciendo y la presentación de esto como una agresión a lo vasco puede que se mueva. Resultado final: HB seguirá siendo una primera fuerza en Guipúzcoa. ¿Qué es más importante, que no lo sea o que Jon Idígoras esté en la cárcel? Yo creo que no lo sea, pero esto es una valoración. política.
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