El 'rap` del olvido y la insumisión juvenil

Los dirigentes de la comunidad etíope están convencidos de que el Gobierno israelí va a tener que hacer mucho más que mitigar los síntomas de la crisis, a fin de restaurar la armonía. Los etíopes quieren trabajo, escuelas y ayuda social. Es decir, que las sentidas disculpas transmitidas por el Gobierno de Simón Peres se transformen en hechos concretos y que se implante un sistema capaz de anular todo vestigio de racismo."Nuestros hijos van al Ejército, arriesgan su vida y donan sangre sólo para que sea arrojada a la basura", señala Amoir Adamso, cuyos dos hijos hacen su servicio militar. "¿Por qué no se nos dijo nunca que jamás iban a usar nuestra sangre?", inquiere.

En una barriada de Tel Aviv, el etíope Daniel Oriah se está preparando para librar su propia batalla contra el racismo. Es un rapero del grupo Dreams, que le está dando los últimos toques a su más reciente composición en inglés, hebreo y amárico. "Que se olviden", dice, "no iremos al Ejército y ésta no es sólo una posición de nuestro grupo", dice. "Todos los jóvenes de Etiopía en edad militar piensan lo mismo". La letra de la canción de Dreams refleja en gran parte el sentimiento de los etíopes judíos de Israel: "Habéis dudado de nuestro judaísmo, / habéis denigrado nuestro nivel de inteligencia, / nos habéis descartado de la sociedad como objetos dañados, / pero esta vez habéis ido demasiado lejos, / habéis tirado nuestra sangre como si fueran viejas hojas de otoño...".